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The Libertines - Anthems for Doomed Youth

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The Libertines - Anthems for Doomed Youth
The Libertines - Anthems for Doomed Youth

Virgin EMI Records / 2015

Artista(s)

The Libertines

The Libertines regresan cantando a los condenados.

Escuchar al cuarteto de londinense más irreverente de nuestros tiempos, siempre es un agasajo. Mejor aún es saber que The Libertines arregló sus diferencias y pronto estará en nuestro país para subir al escenario del festival Corona Capital 2015.

La banda liderada por el excéntrico Carl Barât y Pete Doherty está de regreso con su tercer material, el cual consta de 16 himnos (versión deluxe) que rápidamente se convierten en tus favoritos. Retomando la poesía bélica de Wilfred Owen, la controversial banda londinense bautizó a su tercer álbum de estudio: Anthems for Doomed Youth.

Entre toques de nostalgia y esperanza, el disco inicia con “Barbarians”, un tema donde la voz de Doherty es perfectamente vestida con baterías, rasgueos y coros que te hacen subir el volumen del estéreo.  El ritmo baja para el segundo tema, pero la emoción aumenta con la llegada de un pegajoso coro.

La decadencia de una guerra y la esperanza de una tierra prometida la escuchamos en el tema que dio el nombre al disco. Este melancólico y revolucionario track que te invita a soñar, es apenas el comienzo de lo que será una travesía inolvidable junto a estos músicos y poetas locos.

“You are my Waterloo” es una balada romántica perfecta para una tarde lluviosa, que sorprendentemente, data del año 1999. Bailar, cantar y disfrutar es todo lo que puedes hacer cuando escuchas la demencia británica en tan simples, pero potentes acordes.

Con “Heart of The Matter” recordamos viejos tiempos al escuchar de fondo las guitarras de “Dont Look Back in to the Sun”. El descaro con más tintes punk llega con “Fury Of Chonburi”. Esta furia es interrumpida por “The Milkman’s Horse”, en donde el amor y el desamor resuenan a cada instante. Sin embargo, la rebeldía revolucionaria regresa con “Glasgow Coma Scale Blues”El piano anuncia el final con “Dead For Love”, en donde la obscura narrativa te envuelve en una desgarradora adicción, en la que sufrir es la única manera amar, y morir una forma de vivir.

La edición especial sube los ánimos más al estilo rock and roll con “Love On the Dole”. En seguida, “Bucket Shop” y “Lust of The Libertines” nos dan más de esa esencia irreverente y despreocupada de la banda, demostrando que tomarse la vida menos en serio, no siempre viene mal.  Finalmente, un sonido acústico es el que cierra esta larga entrega con “Seven Deadly Sins”, demostrando que a pesar de las dificultades ocasionadas por los excesos, Barât y Doherty, siguen siendo la pareja ideal del rock.