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Independiente / 2021
Nunca se debe juzgar a una obra por su portada pero en ocasiones es muy complicado de lograr. No es necesario llegar a la grandilocuencia del estudio inglés Hipgnosis porque The Beatles con su álbum homónimo mostró el poder de la sencillez. Aunque en el caso del primer trabajo en solitario de Ricardo Jacob el resultado no es particularmente atractivo. Pero más allá de la parte visual lo importante es analizar el contenido y todo lo que se puede escuchar.
En primera instancia es necesario señalar que a pesar de ser su ópera prima en realidad se trata de un músico y escritor con una extensa trayectoria. En el pasado ha sido integrante de Los Jaigüey y Thelmo Castelló y Los Soundalikes, mientras que en la actualidad forma parte de Los Importantes de la Noche, No Habrá Final Feliz y Sangre Asteka.
A pesar de lo anterior, no hay mayor satisfacción que tener el control total y eso llevó al músico radicado en Morelos a crear cuatro composiciones instrumentales. Son piezas en las que explora sonidos que no tendrían cabida en cualquiera de sus trabajos anteriores. Lo que más destaca es que se aleja de los terrenos convencionales del rock para afincarse en estilos tan variados como el krautrock y la llamada world music.
La pieza que abre el EP combina la sensación que produce visitar un desierto a mitad de la noche con una hipnótica guitarra. Se siente cierta aura de misterio en cada nota y su ritmo cadencioso asemeja el trabajo solemne de Henry Mancini en el cine.
Por su parte, en “Hub” y “Astatqé” se aprecia con claridad la intención de emular ciertos sonidos africanos. Ambas piezas recuerdan los acercamientos que ha hecho Damon Albarn hacia el continente negro y naciones como Etiopía y Malí. Hay percusiones místicas con las que se adoran deidades y también es bastante similar a la programación habitual de Radio Pocajú.
En tanto que “Gojo” es el tema que le pone punto final al trabajo. El sonido experimental se mantiene pero en lugar de buscar vislumbrar el futuro se enfoca en rememorar el pasado. Al menos en espíritu es bastante similar a lo hecho por el sello americano Putumayo con sus compilaciones que han servido para darle visibilidad a las raíces de la música latinoamericana y afrocubana.
Mientras la mayoría de los músicos actuales ofrecen resultados homogéneos Ricardo Jacob se distingue porque no teme adentrarse en senderos poco explorados. La portada poco atractiva no le hace justicia a la experiencia auditiva que ofrecen las cuatro piezas que conforman el trabajo.