Red Ribbon
Planet X

Catártico, vivencial e inclusive existencialista. Un disco que propaga, a través de historias, la temerosa fragilidad de la vida.

Red Ribbon crea este proyecto de rock alternativo experimental que asemeja al shoegaze, psych folk y el dream pop, donde unifica colores y tonalidades blanquecinas, como una analogía de guitarras reverberantes, ligeras y frías, que acompañan vocales apacibles, amansados, y se postulan como pieza principal de cada obra. Cada extracto contiene una fuerte carga emocional o anecdótica, que si bien habla por sí sola, cautiva en todo su conjunto en género y esencia. 

Para este LP, Emma Danner labra a cinceladas un espacio mental para cada canción, el cual sirve para liberar pensamientos intrusivos, narrativas personales y dudas existenciales:

“Todos enfrentamos inevitablemente nuestro propio dolor. Nadie está exento de eso. Yo uso mi música para refugiarme, y la hago lo más experimental posible para recordarme a mí misma que cada performance o canción es una una sola oportunidad de hacerlo sin volver a repetirlo. Así puedo entender mis traumas de una manera similar”. describe la cantante sobre este segundo álbum 

La música convierte mi dolor en un proceso. Hay paz y sanación en el proceso ".

Con la producción de Randall Dunn (Sunn O))), Earth, Marissa Nadler, Shame, Pallbearer), y los músicos involucrados en su grabación, Planet X fue digerido de pies a cabeza e impulsado a salir de una zona de confort creativa, mientras todos descubrían el profundo significado de cada track en el proceso.  

Grabado en cinco estudios diferentes y tres ciudades distintas a lo largo de un año, la compositora completó once canciones en esta producción con una marca característica y unitaria. 

Si partimos de los temas más esenciales encontramos al segundo en lista:“Way”, una de las obras que asienta al escucha con el poder de la distorsión, coros pegadizos y baterías contundentes  En ella se postula el menester de “encontrar semejanza en la vida, antes de que sea muy tarde”, y en las propias palabras de Danner, “habla sobre la última noche que pasas con tus seres queridos en la tierra”. Sin duda, esta canción puede formar parte de un grupo esencial que determina totalmente el disco. 

Por otra parte tenemos temas como “Renegade”, que a partir de un lapso menor a los tres minutos de duración, postra una idea sobre ser tu propio enemigo, y ese escape constante por huir de de ti mismo. Todo acompañado de la sutileza de un classic combo: Guitarra, batería, bajo y voz.

Inclusive contiene obras con temáticas muy personales como “High”, que explora distintos significados como el mundo de las drogas y su adicción a ellas, o  “puede tratarse de cualquier cosa en tu vida que te ponga drogado". En esta canción la cantautora relata: 

“Perdí mi primer amor por una adicción a los opioides y fui un consumidor de opiáceos en mi juventud. Toda mi vida he estado tratando de averiguar qué se puede hacer para expandir conciencia fuera del uso de drogas, y no es que yo esté muy en contra del uso de drogas o algo así, pero por el bien de permanecer con vida, ¿Qué puedes hacer?” 

Planet X ahonda en estructuras simples que realmente podrían no requerir de mucho esfuerzo para delimitarse en un género, sin embargo aterriza en la amalgama psych folk/dream pop/rock alternativo ya mencionada. Si bien este compilado no es ajeno a un sonido que nos permita no encasillar dentro de un grupo de artistas semejantes, eventualmente es propositivo y adquiere gran valor respecto a sus letras e historias expuestas. La transparencia emocional de estas canciones hacen de este LP un disco sincero. Un símil personal e íntimo con el que más de uno podría identificarse.