10
Paisley Park Records / 2020
07/Oct/2020
Reconocido como uno de los artistas más relevantes de la música moderna y después de casi 5 años de su fallecimiento, Prince Rogers Nelson ha vuelto al mundo musical con el lanzamiento de un álbum compilatorio.
La reedición de poco más de 8 horas de música del Rey del Funk es una realidad en la edición deluxe de Sign O’ the Times. El set contiene 8 CDs y un DVD que fácilmente explotarán la cabeza de los fans de Prince, llevándolos en un recorrido que va de la melancolía hasta la fiesta, pasando por los placeres sexuales y el amor verdadero. Los ritmos funk, gospel, R&B, synth pop y rock se mezclan perfectamente para conformar cada minuto de este compilado de 92 canciones.
La primera versión de Sign O’ the Times consistía de un álbum doble que fue lanzado en 1987 y que fue reconocido como el mejor álbum de la década de los 80 por la revista Rockdeluxe, a diferencia con el nuevo lanzamiento, el compilado consistía únicamente de 16 canciones, las cuales han sido retomadas para conformar las primeras dos partes de la nueva edición. Entre las canciones destacan “Housquake”, “Hot Thing”, “The Cross” y la favorita de varios “U Got The Look”.
A partir de la tercera y hasta la sexta parte de Sign O’ the Times encontrarás los Lados B que acompañaron los álbumes de Prince. Podrás disfrutar de las versiones extendidas de diversas canciones como “La La La He He Hee” además de encontrar algunas diferencias interesantes en algunos de los temas como “I Can Never Take The Place Of Your Man” en una versión más pop.
Resulta complicado no emocionarse con canciones como “Love and Sex” que te conquistan con la perfecta armonía entre la voz de Prince y el solo de guitarra, mientras que canciones como “I Need a Man” nos recuerdan los inicios de el Rey del Funk.
Las últimas dos partes del set se componen por las versiones en vivo de la gira Sign O’ the Times grabados en Utrecht, Países Bajos, donde destacan temas como “Purple Rain” y “Kiss” para finalmente terminar la fiesta con una magnífica interpretación de “It’s Gonna Be a Beautiful Night”.
Quizá sea este uno de los mejores materiales de todo el tiempo, un merecido homenaje a quien fuese toda una majestad púrpura, una obra maestra que puede apasionar a quienes amaron a Prince como a quienes apenas lo están conociendo. No hay mucho más que decir.
9
BMG Company / 2020
06/Oct/2020
Si eres de los amantes de la música disco o de los que cree que nunca pasa de moda, entonces debes conocer a Róisín Murphy sí o sí.
La nativa de Wicklow, Róisín Murphy lleva más de dos décadas lanzando música de baile excéntrica. Ha sido un elemento perdurable e indispensable en los ritmos dance, house y pop tanto como cantante en el dúo Moloko, como artista en solitaria que sigue presente cuando se trata de éxitos en la listas de los temas más escuchados.
Después de su primer single, luego de 10 años, el pasado 2 de octubre lanzó su quinto álbum titulado Róisín Machine, que es tal como lo describe Róisín “un gran paisaje sonoro”. Es una producción que sin duda está dentro de las mejores, pues fusiona sin esfuerzo su marca registrada y los sonidos de discoteca con grandes ritmos, electrónica cambiante, funk conmovedor, cuerdas exuberantes y su voz gloriosa, distintiva y conmovedora.
El disco es un viaje musical de 54 minutos que contiene 10 pistas, en el que cada canción se mezcla con la siguiente. Comienza con el sonido ambiental más relajado de “Simulation”, terminando con los masivos y estimulantes bangers de “Narcissus”, “Incapable” y “Jealousy” que estarían garantizados para llenar las pistas de baile de los clubes de todo el mundo.
“Game Changer” es un ritmo hipnótico y dichoso con una sensación etérea y el intrigante “Shellfish Mademoiselle” es otra pista destacada, con un piano y sonido house de los 90. “Murphy's Law” es una canción funky y conmovedora sobre un romance fallido. Su influencia se puede escuchar en la vibración de discoteca nebulosa, lenta y en la vibra house neoyorquina de “We Got Together” que nos hace temblar los hombros.
Es difícil tener una canción favorita, ya que cada una funciona como una pista independiente o en el contexto más amplio de la producción discográfica. A pesar de la superposición de temas antiguos con pistas nuevas, esta es una colección mezclada al estilo de la vieja escuela, y preferentemente escuchar de principio a fin. “Kingdom of Ends" es todo un viaje intergaláctico con tintes teatrales, mientras que en "Something More" la artista expresa que necesita satisfacer sus necesidades de querer algo más aunque ya lo tiene casi todo.
Róisín Machine rinde homenaje a sus raíces pop y house. Es un disco especialmente relevante para estos tiempos: suena muy bien en casa, pero también pide ser escuchado fuerte y en vivo. Solo queda decir “Bienvenida, Róisín, la pista de baile es tuya nuevamente, tu álbum será un contendiente para álbum del año”.
Haz click en la banderilla para guardar artículos en tus favoritos, ingresa con tu cuenta de Facebook o Twitter y accede a esta funcionalidad.
Avisos