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Independiente / 2018
Parazit es una agrupación depurada cuyo estilo no pasa desapercibido. Varios elementos de su música permiten que sea una de esas bandas que llaman la atención de los oídos rigurosos. Metal progresivo, jazz fusión, funk metal y otros componentes que hacen de esta propuesta una digna de seguir. En resumen, djent mexicano que le compite dignamente a cualquiera del mundo.
Tras poco más de un año de lanzar su álbum Paradigm Paralysis, Parazit estrena su cuarto LP: Aural Coincidence; material de 10 canciones que de principio a fin nos muestra las facultades en composición, ejecución y acoplamiento de los tres músicos tapatíos; un engranaje complejo que sus integrantes denominan instru-mental.
“Tokamak” es la pista que da apertura al nuevo material. Guitarras en armonía y fade in dan inicio al tema. De inmediato, explota el metal sincopado. Tokamak también es el nombre de un aparato diseñado para fusionar partículas de plasma y así generar grandes cantidades de energía. Si éste primer track alude a lo dicho, fue un nombre acertado.
“DMNT” nos deja escuchar, tras un breve inicio de guitarra acústica, más poder para después llevarnos por pasajes tranquilos, guiados por interesantes riffs. José Macario plasma sus capacidades y recursos técnicos, con o sin distorsión, en este segundo corte y demuestra que es parte de una generación de guitarristas jóvenes, innovadores y virtuosos que están revitalizando su instrumento. Los amantes de éste, lo agradecemos y admiramos. La pieza termina en fade out y nos deja con ganas de más.
“The Ghost in The Machine” continúa el viaje. La maquinaria disonante sigue con su complejidad sonora. Más poliritmos de Christian Gómez, más efectos y densidad de Kello González. Un cierto tono siniestro suena y da congruencia al título.
Sigue “Kaosusoak”, elegido como el primer adelanto de Aural Coincidence. El tema que se compartió hace poco más de un mes es un buen ejemplo de la magia del progresivo y su orden del caos. Líneas sonoras divergentes que vuelven a encontrarse y se vuelven escindir una y otra vez. Gran tema.
Llega “Quark Soup”, una nueva colaboración de Adrian Terrazas-Gonzalez, saxofonista que ha acompañado a Parazit en discos anteriores y que pudimos apreciar en vivo en la presentación que Parazit tuvo en la edición del Knot Fest México 2017 . Llega aquí también el jazz fusión. González muestra sus dotes técnicos con slaps, pops y solos. La influencia de Primus en este track es marcada. No solo la destreza del bajista mexicano nos evoca a Claypool y compañía; González hace uso del mismo instrumento que caracteriza al músico californiano, creado por el legendario luthier Carl Thompson, cuyo sonido es inconfundible. Uno de los mejores temas del nuevo LP, aún con su final un tanto apresurado.
La nueva entrega sigue con “Summum (Ruinae)”, (con un muy buen riff de bajo que pronto es acompañado por los otros instrumentos). Siguen también la calidad, la creatividad y la habilidad en un tema de pura distorsión.
De nuevo Adrian Terrazas-Gonzalez colabora y, sobre todo, aporta en "Acerbic Wit". Aquel grandioso proyecto del virtuoso Luke Jaeger, Sleep Terror, viene a la mente con esta canción.
Otras dos contribuciones siguen en Aural Coincidence: “Sinousend” junto al proyecto de música de cámara electrónica y ambient cello Violoncheloops, también de Guadalajara y “Uhørligathirst”, en donde otro virtuoso, Tonio Ruiz (Coda, QBO) aparece, dejándonos uno de los temas destacados de la nueva placa.
El corte final llega con “Ha'aha'a Halk”, congruente al criterio de este nuevo material de estudio que nos demuestra que Parazit tiene los ingredientes y las capacidades para llegar lejos y sorprender a propios y extraños —en estudio y en vivo—. Así, la banda regresa después de una corta ausencia con un muy buen disco lleno de oscilaciones ejecutadas con autoridad. Esperamos más de ellos, sin duda.