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Rough Trade / Castleface Records / 2020
Thee Oh Sees, The Ohsees, Oh Sees, Orange County Sound, OCS, y ahora, de nuevo con Osees, John Dwyer está de vuelta con su hijo predilecto. No es que lo abandone de manera habitual, pero lanza tantos discos al año y con distintos proyectos, que ya es complicado saber dónde no mete la mano en Castleface o cualquier disquera de amigos donde esté involucrado. El multiinstrumentista, que también estrenó material bajo Bent Arcana y Damaged Bug este año, comparte Protean Threat, el 23° álbum de estudio de la banda.
Los discos de Dwyer se reciben sin mucho anticipo, pero la calidad sonora no se demerita. Parece que cada semana se hunde en el fango y nada por ideas en su mente hasta alcanzar un nuevo yo. Podría sonar desgastante que tenga que cambiar el nombre cada dos o tres discos, pero tal vez sea una forma de representar a cada alter ego que vive en su interior. Canciones más cortas, cuerdas más ajustadas, un aletargamiento más profundo. Cada uno tendrá su magia en el corazón de John, y le gusta representar a cada alias sin intentar menospreciar el alma de la banda en sí. El sello del californiano de verdad es cautivador en el intento por sorprender con su talento, pareciera no encontrar un estancamiento creativo y que puede soltar a la bestia a placer.
“Scramble Suit II” empieza el viaje de Protean Threat, y sabes de inmediato que cambió la fórmula a lo presentado en Face Stabber. Agresivo, punk, un vórtice que va girando de forma violenta. La voz de Dwyer es más frenética, como si estuviera inmerso en un videojuego. Gran comienzo. “Dreary Nonsense” regresa a la banda a esos cortos arañazos que duran menos de 2 minutos. El grupo se siente en deuda con sus cimientos y aquí demuestran que jamás van a alejarse de ello. “Upbeat Ritual” nos recuerda un poco al aquel maravilloso Carrion Crawler/The Dream, los sintetizadores y efectos es una marca de la casa. Todo en su lugar tras tres temas, no sorprende, pero sí es un gran trabajo.
“Red Study” es la primera gran canción de Osees en Protean Threat; una influencia más funky y psicodélica que entra directo a tus oídos. Aquí la doble batería de la banda por fin hace su trabajo con creces creando sonidos desfasados de manera casi imperceptible, se enredan dando como resultado un audio más primitivo. Primer balazo contundente y que hace quieras escuchar mucho más. Se vale repetir. “Terminal Jape” vuelve a tonos más desgarradores, la rabia del proyecto que debe ser escuchada en vivo en al menos una ocasión.
“Wing Run” vuelve a los sintetizadores y da una vuelta a la tuerca. Este disco me parece un guiño a lo hecho por Dwyer en una década, pero reducido a 13 canciones. Aquí recuerda un poco a la fantasmagórica esencia del Orc. “Said the Shovel” borra todo y se va de paseo por el espacio, algo totalmente diferente para celebrar la mitad del camino. “Mizmuth” sigue con el juego espacial y con riffs cortados y pegajosos. Se siente bien escuchar salirse del habitual.
“If I Had My Way” fue de los pocos adelantos para este material, un tema con tintes más clásicos por catalogarlo de alguna manera. Sin tantos efectos en las guitarras y con las baterías sonando muy bien, la agrupación sigue ganando. “Toadstool” es de lo más largo en el LP rayando los 5 minutos de duración. Cambios constantes, no hay un seguimiento, hay de todo y para todos. Tal vez el disco más adecuado si quieres saber de una vez por todas qué es un John Dwyer.
“Gong of Catastrophe” auspicia el final y trae de nuevo el gran sonido de Dan Rincon y Paul Quattrone fusionándose como una gran batería de cuatro manos. Vuelve a ser uno de los grandes aciertos del material. El dispar y armonioso encuentro. “Canopnr '74” y “Persuaders Up!” son las encargadas de cerrar Protean Threat, un material que no tiene línea de seguimiento y se rompe entre cada corte.
El salvajismo y el atrevimiento son el sello de este zarpazo de Osees. Más allá de no caer en un sistema lineal que marque un rumbo sonoro, Dwyer sí lo hizo por medio de las letras, que toman un síntoma político a nada de las elecciones en los Estados Unidos. "Los futuros jóvenes, conspiren"… “Lo que sucede, lo que pasa, el sistema se ha descompuesto”... “Lavado encubierto de tu mente”... son algunas de las frases del músico en sus canciones. Me parece fue un gran momento para que volvieran a aparecer. Aunque siempre lo es, nunca nos cansaremos de ellos. La pandemia nos ha quitado demasiado, se necesitaban.