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Música exótica oriental al alcance de tus oídos

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Música exótica oriental al alcance de tus oídos
Música exótica oriental al alcance de tus oídos

Monkeytown Records / 2015

Artista(s)

Omar Souleyman

Omar Souleyman se encuentra estrenando su más reciente disco de estudio llamado Bahdeni Nami. Disco que fue firmado por Monkeytown Records, misma disquera que tiene entre sus filas a los productores alemanes de Modeselektor, quienes estuvieron produciendo este disco. Un material que tal vez creó mucho morbo de qué es lo que iba a mostrar después de lo escuchado en su anterior disco Wenu Wenu, pero que sigue manteniendo la misma línea. Música tradicional del Oriente al alcance de nuestras manos y oídos.

Omar-Souleyman

Muy pocas veces tenemos la curiosidad de escuchar cosas que no vayan más allá de lo que los blogs y páginas especializadas de música nos recomiendan, a no ser que seas un melómano de sangre pura, lo cuál te haga rascar la música de lugares lejanos como Siria. Omar Souleyman en su país es un personaje muy famoso, quién cantando en bodas y grabando cientos de discos caseros se convirtió en el rey para el mercado negro de aquél país, ya que su discografía cuenta con más de 500 discos de éste tipo.

Bahdeni Nam es un material de 6 candentes canciones, cada una de ellas, a excepción de “Mawal Menzal”, canción que abre el disco, todas sobrepasan los 7 minutos de duración, todo un recorrido de música tradicional árabe, adicionada con beat exótico que nos pone al instante querer estar en el dabke o mover las caderas como unos auténticos Belly Dancers. Y mientras escuchamos la canción número tres del disco, “Tawwalt El Gheba”, nos imaginamos bellas mujeres, áridos paisajes, comida picante y coloridos vestuarios.

Realmente en éste nuevo material de Omar Souleyman no se puede hablar de la mano de Modeselektor en los tracks, ya que su música no puede ser manipulada tan fácilmente, es su esencia, su cultura y su manera de dar a conocer al mundo la riqueza musical del Oriente, y algo que, quitando ése morbo que nos llama la atención de todo lo exótico, deberíamos valorar mucho más.

Para amar la música no se necesita que Damon Albarn o Björk las escuchen y nos digan que la tendencia ahora es hacía lo que ellos oyen. Si volteáramos más nuestros oídos a rascar en las entrañas de la música de otros países y continentes, nos encontraremos con una riqueza musical enorme, lo mismo pasa con la música de nuestro país. A principios de año tuvimos la fortuna de ver a  Omar Souleyman como parte del Festival Nrmal, quién convirtió el cierre del festival un una locura épica. Ahora imaginemos de toda esa música que nos podría estar poniendo a mover como locos el cuerpo y que por no querer buscar más allá, nos la estamos perdiendo.