Martin Gore
The Third Chimpanzee

El co-fundador de Depeche Mode sigue reinventando su carrera solista con un sombrío EP que recuerda a nuestras inquietudes apocalípticas.

Después de huir del planeta de los simios y volver a la Tierra, el coronel George Taylor se quiebra en llanto al salir de su nave y encontrar la Estatua de la Libertad hundida en la arena, pues esta imagen le confirma su más grande temor: la civilización humana se extinguirá en el futuro a causa de los primates. Con esta escena termina una de las películas más famosas de los años 60, cuyo sentimiento apocalíptico ha sido recuperado por Martin Gore y trasladado a las opresivas sonoridades electrónicas en The Third Chimpanzee (2021), EP estrenado vía Mute Records.

Apabullante y oscuro: así es el sonido con el que el también co-fundador y compositor principal de Depeche Mode da un nuevo matiz a su carrera solista. Ésta comenzó con el EP Counterfeit (1989), integrado por covers al más puro estilo de su grupo original, y evolucionó hasta el larga duración MG (2015), donde Gore adoptó el estilo del ambient house y la música experimental.

En The Third Chimpanzee, Martin Gore recupera la línea de MG y la lleva a un extremo lúgubre, que flirtea tímidamente con las sonoridades industriales abanderadas en los años 80 por grupos como SPK, pero también con referentes actuales de la experimentación electrónica como Holly Herndon.

Los cinco temas instrumentales del EP, nombrados a partir de especies de primates, ofrecen vistas diferentes a la alarmante predicción del dominio animal sobre el humano: “Howler” y “Mandrill” abren el camino con sintetizadores incisivos sobre percusiones marciales, y un oscilador oculto que asemeja una ahogada voz humana.

Continúan “Capuchin” y “Vervet”, que entre aullidos disonantes y continuas líneas de bajo, parecen los momentos más bailables (o menos abstractos) del EP. Finalmente, “Howlers End” sigue al primer track desde su transformación en una melodía casi fílmica, y cierra el viaje con un hálito de esperanza.

Pese a su brevedad, The Third Chimpanzee es un material inagotable, pues cada escucha revela nuevas capas de sonido y melodías que se gestan en la repetición. Este EP representa también una transformación singular dentro de la carrera de Gore, si bien algo de su atmósfera oscura se asomaba por momentos en Delta Machine (2013) de Depeche Mode.

Por lo demás, materiales como éste nos vienen bien durante los tiempos que corren, pues expresan la paranoia del encierro y, además, nos advierten sobre nuestra indiscutible fragilidad. No como individuos, sino como especie.