Mabe Fratti
Se Ve Desde Aquí

Viajes y percepción.

La mezcla de lo orgánico con lo sintético. Lo vulnerable con lo hosco. La dulzura con la oscuridad. Cuerdas que se entrelazan como ramas de un bosque precioso pero sofocante, y a lo lejos una voz frágil, honesta. Parece ser que nos indica que hay una luz al final del túnel, pero prometiéndonos un sendero escabroso para llegar a ella. Así es viajar por el mundo de Mabe Fratti.

La cantante y compositora guatemalteca, asentada en la CDMX, se ha convertido en una de las figuras más fascinantes de la escena alternativa gracias a su propuesta única de ambient folk hermosamente impredecible. Armada con un cello, un arsenal de teclados elegidos cuidadosamente y grabaciones de campo que pudieron haber sido recogidas de otra dimensión, Fratti ha sido una guía, una sirena y un oráculo capaz de transportarnos hasta los rincones más oscuros de nuestro corazón, y en cada viaje dejándonos con un caleidoscopio de sensaciones. Después de la hermosura levitante de Será Que Ahora Podremos Entendernos del 2021 y Estática, una colaboración con la igualmente talentosa y enigmática Concepción Huerta que explora todos los vaivenes posibles que pueden derivarse de una frase melódica, llega para retomar los recovecos de ambas obras, triturarlos, volverlos a armar y crear Se Ve Desde Aquí.

Desde el inicio se augura un viaje vistoso pero inestable, con las cuerdas que rascan y chillan los sintetizadores amenazantes de “Con Esfuerzo”. La subsecuente parada da pie a unos rasgueos de cello que se sienten como pasos temerosos, sonorizando las alertas y encantamientos que Fratti declama en “Desde el Cielo”, con una que otra textura asomándose cuales ojos amarillos de roedores que nos espían. Un Yamaha CS-60 parece quitar la neblina por momentos en “No Se Ve Desde Acá”, reemplazándola con diferentes sonidos proviniendo de quién sabe dónde con quién sabe qué intención, pero la voz e instrumento de Fratti nos envalentona para continuar con la travesía.

Como ya es característico en el estilo de Fratti, la elasticidad de los teclados arma todo un ecosistema cambiante en cada tema que sirve perfecto como contrapunto para que las cuerdas maticen y respondan de una manera más activa, sonando como cama de acompañamiento suave en “Esta Vez”, o como una bestia siniestra en “Cada Músculo”. Pero decir que Fratti le da una personalidad o vitalidad, más bien, a su instrumento, sería una declaración obvia que evidentemente quiere evadir. 

Lo que Fratti hace es nutrirse de cada elemento sonoro a su disposición, incluyendo - y a veces, especialmente - el silencio, para crear estos mundos y sensaciones que ya mencioné. Esto, y hacernos creer que de un minuto a otro pueden cambiar, asimilándose a la condición humana. Con toda su magia e instrumentación, Se Ve Desde Aquí es otro fascinante paso en la carrera de Fratti y otro viaje más oscuro y más honesto que sus obras anteriores, revelando un poco más de nosotros mismos con cada creación. ¿A dónde nos llevará después?