111117
#LRReseña: Thieves Like Us — Thieves Like Us

8

#LRReseña: Thieves Like Us
Thieves Like Us

Seayou Records / 2017

Artista(s)

Thieves Like Us

Thieves Like Us y su reencuentro musical.

Por Fernanda Flores

Hace 10 años escuchamos por primera vez una canción que, de alguna manera, se volvió un himno para varias generaciones: “Drugs in my body”. Este track hizo que todos volteáramos a ver al trío multinacional llamado, Thieves Like Us. De inmediato se ganó nuestro corazón y un espacio en nuestra biblioteca musical.

Siguieron seis años sin parar y una discografía compuesta por cuatro álbumes. Pero, en el 2012, los músicos decidieron darse un respiro dejando al vocalista Andy Grier con mucho trabajo y bastantes ganas de escribir. Lleno de inspiración, en 2017 llegó su quinto álbum: Thieves Like Us. En esta nueva entrega se estrena alineación: el bajista Thomas Franklin; el baterista Tore Knipping; así como los vocalistas de respaldo Martin Duverglas, Mia Van Matt y Monika Martinez.

El álbum homónimo de 34 minutos y 9 canciones, es un material fácil de absorber y de entender. Se queda en tu memoria cada palabra, oración y melodía con la que está compuesto. Además, la mezcla de electro pop, sintetizadores y un poco de post punk ocasionan que quieras escucharlo una y otra y otra vez.

La ahora banda conformada por cinco miembros cuyo nombre es tomado de una canción de New Order—, presenta un álbum que cita temas controversiales de enfoque social. A pesar de lo realista y cruel que pueda sonar no quieres dejar de moverte, corear y estar activo mientras escuchas completo el Thieves Like Us.

De principio a fin tiene una misma línea de pop electrónico con mayor peso en el bajo y la batería. Ciertos toques nostálgicos te hacen sentir como si no pertenecieras a ningún lugar. En general es un buen disco; pero, las canciones que más resaltan son: “Tears", “Moon”, “E-problems", “Israel” y, “Shake the Light”.

Escuchar el nuevo álbum de Thieves Like Us es una experiencia interesante porque vuelve a conectarte con esa banda que admirabas hace una década; te hace querer aprenderte todas las letras para poder cantarlas mientras vas caminando por la calle, cerrar tus ojos y, desaparecer.

110929
(Sandy) Alex G — Rocket

8

(Sandy) Alex G
Rocket

Domino / 2017

Artista(s)

(Sandy) Alex G

(Sandy) Alex G; crecer, correr y…

Son mínimos los compositores que tienen esa esencia que los hace únicos (Bob Dylan o Leonard Cohen). También, son pocos los que logran conservar sus ideales a la hora de crear música. Durante cuatro años, Alex Giannascoli, conocido como Alex G, más recientemente (Sandy) Alex G, fue capaz de hacerlo al filtrar sus primeros cinco discos a través de Bandcamp. Controló todo el proceso creativo desde su casa para, después, unirse a la disquera Lucky Number y, finalmente ser parte del sello Domino.

Crecer es parte de la vida. Después de ser comparado miles de veces con Elliot Smith, colaborar con Frank Ocean (Endless y Blonde) y lanzar siete álbumes, Giannascoli decidió trabajar con más músicos en su último disco, Rocket. El resultado: su trabajo más completo, metódico y estilizado hasta el momento.

Una atmósfera country-folk envuelve la primera parte del álbum. La delicadeza de un banjo y una voz dispersa en “Poison Root” nos hace sentir parte de una escena cinematográfica en la que corres con tu perro en las montañas durante un atardecer; el alegre juego de piano, pandero y guitarra en “Proud”, y los magníficos violines; que nos recuerdan las primeras canciones de Neil Young. “Bobby” está mezclada con la hermosa voz de Emily Yacina.

También está el lado dulce. “County” posee un sonido blues. La distorsión rock llena de eco en “Witch” ameniza con dulces coros (trae a nuestra mente “Monomania” de Deerhunter). Un lapso bastante extraño, no de una mala manera, es formado por “Horse”, creando un ambiente de suspenso electro-experimental, y "Brick" que inunda nuestros oídos con una voz rasposa y riffs bastante hardcore que pueden resultar de su amor por True Widow.

La parte final se vuelve más lenta. “Alina” y “Big Fish” son sencillas baladas acústicas llenas de melancolía; mientras que “Rocket” y “Powerful Man” traen de vuelta ese género americana característico de intérpretes como Lucinda Williams, una de sus cantantes favoritas. “Judge” transmite el sonido de las bandas rock de los ochenta con ese toque lo-fi que distingue el trabajo de Giannascoli.

“Sportstar” es una muestra del proceso creativo del artista. Es fácil reconocer cada uno de los instrumentos que integran la canción: pedales, batería y piano se unen para crear uno de los temas más interesantes. “Guilty” da fin al disco con ritmos jazz, llenos de increíbles arreglos de metales.

Otra cualidad de Giannascoli es su talento para crear personajes en cada uno de sus discos. Produce historias en las cuales sus alter egos “se divierten, se enamoran, desarrollan obsesiones, se meten en problemas” (una viva imagen de la personalidad del artista).

Rocket es el más crítico y ambicioso de los álbumes de Giannascoli, una representación de las ambiciones del músico, de su capacidad como compositor. Es un viaje a través de distintos géneros que te invita simplemente a disfrutar de la magnificencia musical que rodea a la obra. Puede ser que (Sandy) Alex G tenga que definir más su estilo, ya que el disco puede resultar complejo debido a su diversidad de sonidos. Simplemente hay que seguir sus ensoñaciones y continuar para elevarse como un cohete que va al espacio exterior.

  1. Favoritos

    Haz click en la banderilla para guardar artículos en tus favoritos, ingresa con tu cuenta de Facebook o Twitter y accede a esta funcionalidad.

#LRReseña: Thieves Like Us — Thieves Like Us