Gruff Rhys
Pang!

Un viaje entre sonidos africanos con Gruff Rhys.

Gruff Rhys es un viajero musical, un trotamundos en busca de sonidos para jugar con ellos, eso no es un secreto, pero esos sonidos no los hace suyos, él se deja fluir con esos sonidos y les incrusta la chispa de su ingenio.

La producción de Pang! es tan orgánica que incluso a primera escucha puedes percibir dedos deslizándose por las cuerdas de la guitarra, la instrumentación del disco es una mezcla de sensaciones cálidas que excitan nuestra imaginación para llevar a… donde cada escucha quiera ir, es un viaje muy personal… pero es seguro que te llevará a lugares complacientes para tu cerebro.

Con toques de psicodelia -obviamente-, con tintes de tropicalia -por su gran admiración a Os Mutantes y otros artistas brasileños de la época-, así como sonidos africanos gracias a la participación en bajo, mezcla y producción de Muzi, Pang! se escabulle en tus neuronas para llevar hasta la luna la efímera segunda mitad del año, un levantón necesario.

Quizás la barrera del idioma podría considerarse un impedimento para disfrutar al máximo Pang! y la increíble lírica de Gruff, su ingenio burlón y sus ideas políticas, pero la música tiene tanto que ofrecer… que el paseo por el disco no prevé tráfico en el camino, ni baches, ni ningún tipo de socavón; el recorrido se disfruta flotando.

Por cierto, las letras del disco se cantan en galés y en zulu, un reto para cualquiera.

El uso de loops, beats y demás herramientas tecnológicas es mucho más sutil, casi imperceptible, el 90% del disco es acústico, con muy pocos recursos digitales y se goza de la misma manera si puedes percibir los leves toques tecnológicos o no, es un disco para preocuparse de nada.

Hay que agradecer a la WonderBrass por las increíbles voces de metales, a N'famady Kouyaté por jugar con el balafón -instrumento sagrado de Guinea-, a Kliph Scurlock -ex baterista de The Flaming Lips- por los grooves de batería en todo el disco, a Muzi por incendiar con afrobeat la sexta entrega de Gruff como solista y hay que agradecerle a la vida cruzar los caminos de todos ellos.

Porque, entre percusiones con figuras rítmicas irregulares, polirítmias ancestrales, agradables melodías de metales y la bella voz de Gruff Rhys, Pang! es un dulce auditivo para disfrutar con audífonos o a todo volumen en nuestro lugar favorito y olvidarse del mundo, vivir el momento, vivir los sonidos, dándole una gran inyección de energía a nuestra cansada alma.