207253
Flume — Palaces

7

Flume
Palaces

Future Classic / 2022

Artista(s)

Flume

31/May/2022

Las dos caras de Flume.

El DJ y productor australiano Harley Edward Streten, mejor conocido como Flume, presenta su tercer álbum de estudio, Palaces, a través del sello Future Classic. Seis años han pasado desde su lanzamiento anterior, Skin, que le valió ganar un Grammy en la categoría de mejor disco Dance/Electrónica.

También, es el décimo aniversario de su debut, el homónimo Flume con el que irrumpió en la escena musical, mismo que lo colocó de inmediato como una de las figuras más innovadoras de la industria, debido al sonido tan característico que manejaba, su combinación de house, downtempo y future bass, atrajo la mirada de más de una estrella en busca de una colaboración. Precisamente, la fama conseguida a través de los años, es el motor de Palaces, en particular sus vaivenes.

Las giras, con sus innumerables conciertos y presentaciones y sus excesos, junto con el cierre mundial de actividades del 2020, llevaron a Streten a un punto de inflexión. Dejó Los Ángeles para regresar a un pequeño poblado en Australia. Este es un material personal, no tanto en sus letras sino en su creación, donde Flume busca compaginar la libertad de un mixtape con la cohesión de un álbum, tomando como base ritmos y géneros nuevos para él; hyperpop, tecno y dance, pasados por una producción low-tech, todo ello aderezado con sonidos orgánicos crean este paisaje sonoro donde el cyberpunk y la naturaleza se encuentran.

Ejemplo de ello es “Highest Building”, primer tema del disco y que cuenta con la participación de la productora francesa Oklou, en el que se combina el industrial con el ambient que por extraño que parezca queda a unos pasos de ser un hit EDM, rol que ocupa “Say Nothing” junto a la cantautora australiana MAY-A, y que fue lanzado como sencillo.

La otra cara del disco es la experimental, con beats menos convencionales, más pesados y arrítmicos, en este punto resalta “Only Fans” con la artista española Virgen María, así como “Palaces” con el afamado Damon Albarn, donde el trinar de las aves y la sentida interpretación del músico británico anuncian el cierre melancólico a una noche de fiesta.

En conclusión, es un disco irregular, bien producido y con buenas colaboraciones, todo en pos de encontrar un balance entre lo comercial y la expresión artística, cosa que no logra alcanzar del todo, para muchos será confuso y no lograrán ver los finos hilos que tejen las canciones más convencionales y los temas experimentales pasarán de largo, para otros escuchas la experiencia será la opuesta. Mientras llega el consenso seguimos disfrutando del acto equilibrista de Flume.