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Easy Sound / 2014
El día que Eric D. Johnson anunció el fin de Fruit Bats fue uno de los más tristes para quien escribe esto. El folk de esta banda de Chicago tenía un encanto especial sobre mi y The Ruminant Band y Tripper son discos que se han colocado en zonas especiales de mi gusto; sin embargo, su separación no podría considerarla más que un paso necesario.
Johnson siempre estuvo llamado a ser solista, era el sujeto de mayor peso escondido tras ese nombre. Tenía un activismo musical bastante versátil, era capaz de adaptarse y enriquecer con sus colaboraciones, como cuando participó con The Shins o Vetiver.
Al escuchar su disco homónimo, titulado con las siglas de su nombre, pienso que el individualismo fue una excelente opción. EDJ se sale del formato (a excepción de "Lose It All, All the Time", una perfecta continuación de "Tangie And Ray" contenida en Tripper) con canciones no tan estrechas y directas, sino más eclécticas en su oferta.
Eric no busca poner a dormir a la gente con su folk rock suavizado, pero tampoco pretende entregar una maravilla. Suena relajado, con total dominio de una nueva gama de instrumentos que enriquecen su base de guitarra y una característica diáfana voz, airado de frescura.
La fantástica y hermosa pieza de apertura, "For the Boy Who Moved Away", deja claro lo dicho hasta el momento. Es una oda que sintetiza todo lo que Johnson es capaz de hacer: ensimismado en un riff nacido en su cabeza, narra la historia como un cuentacuentos experimentado que da vida a una melodía tierna y conmovedora, embellecida por esos puntos de piano.
Son estos elementos los que dan nuevo rumbo a la carrera de Eric D. Johnson, quien se permitió agrandar los estamentos establecidos con Fruit Bats en temas como "Minor Miracles", con sintetizadores que dan vida a un nuevo ambiente y hacen que olvidemos la guitarra, evitando la monotonía o aburrimiento con un acabado mágico antes de volver a su cascada optimista a ritmo de tap en "A West Country Girl".
El álbum cierra perdiéndose a la vista; "Child in the Wild" se sumerge en reverb soñador, seguida de "The Mountains On Fire (In the Rearview)" que, como epiíogo, augura que el autor se aleja del pasado mientras lo ve por el retrovisor y se dirige a un nuevo horizonte.
Lejos de exponer un individualismo en busca del descubrimiento interno, EDJ muestra a un músico que necesitaba encargarse de toda su idea e invita a sentarse y apreciar la manera en como se desenvuelve, a descubrir qué esconde tras esos hermosos fondos acústicos, que historia está contando esa sabia voz.