Favoritos
Haz click en la banderilla para guardar artículos en tus favoritos, ingresa con tu cuenta de Facebook o Twitter y accede a esta funcionalidad.
90
Zoo Music / 2014
Tras Drifters/Love Is the Devil, álbum doble lanzado el año pasado, Dirty Beaches presenta Stateless, un nuevo EP concebido de forma totalmente instrumental. En él, Alex Zhang Hungtai, la mente intelectual del proyecto, decidió bajarle el tempo a los beats, prescindir de su voz y acercarse hacia la elaboración de ecosistemas de apariencias sutiles y tenues que den lugar a procesos cíclicos e infinitos.
Para su producción, Zhang Hungtai contó con el apoyo de Vittorio Demarin, compositor italiano que aportó los sonidos de violín, mientras que el propio Zhang se encargó del saxo tenor y los sintetizadores. En la mezcla estuvo involucrado Dean Hurley, quien ha colaborado en los diferentes ensayos experimentales de David Lynch, cuya mano y aporte se nota detrás de cada composición.
Stateless es un material de cuatro piezas que abre con “Displaced”, en la que los sonidos obtenidos del violín consiguen dar forma a una intrincada atmósfera cargada de dramatismo, mismo en el que se palpa una densidad a punto de desbordarse. Al oírla, uno se traslada a los escenarios de un drama fílmico en el que el equilibrio de la realidad se sostiene de un delgado hilo que está a punto de romperse para dar lugar a fatalidades, desgracias e infortunios.
Pero el hilo no se rompe, sólo se tensa más y da lugar a “Stateless”, que continúa en la labor de construir ambientes de aparente calma pero saturados de sentimientos de inquietud. En esta ocasión, el drama se intensifica y provoca una angustia que hacia el final se antoja realmente exasperante. Dirty Beaches ha conseguido, con tan sólo estas dos piezas, llevarnos del sosiego hacia una agitada expectación.
La obra continúa por caminos suaves y reflexivos. Así, “Pacific Ocean” surge como una melodía que navega por las serenas y apacibles aguas de un océano infinito, que es transportada y guiada por mansas olas hacia puertos de apariencias seguras y reconfortantes. Para culminar, “Time Washes Away Everything” cumple con el cierre del ciclo mediante estructuras constantes e introspectivas que cavilan sobre el paso del tiempo y su capacidad transformadora.
Sin duda resulta difícil y complejo describir los hilos argumentales de una obra como Stateless, pues en varias ocasiones, a lo largo del EP, esos hilos se nos presentan bajo sombras difusas y en constante cambio. No obstante, Dirty Beaches ha logrado una obra de vértices redondos, tan densos como livianos y tan puros como sórdidos.