D.D Dumbo – Utopia Defeated
D.D Dumbo – Utopia Defeated

Mezclas maestras para el dancefloor en el álbum debut de D.D Dumbo.

Oliver Hugh Perry, a.k.a D.D (Dennis Donald) Dumbo es la nueva promesa australiana de artistas que llevan muy en alto el emblema DIY (do it yourself). Tocar una guitarra eléctrica de 12 cuerdas, utilizar un set de batería sencillo y ensamblar algunos pedales es todo lo que requiere D.D para sus creaciones eclécticas que lo llevaron a publicar el EPTropical Oceans en 2014 y por fin vislumbrar el 7 de octubre su álbum debut Utopia Defeated a través de 4AD.

Existen personas con talento nato para la música y D.D nos muestra eso en “Walrus”, un extracto del todo experimental con muchos tonos funk y voces en off que le dan esa sensación fresca y pop, además del jugueteo en reverb de su voz.

El sonido selvático surge en “Satan”, el track más duradero de Utopia Defeated, y en “Alihukwe”, en ellos localizamos inmediatamente una fuerte influencia de R&R, tanto que nos trasladan a los barrios alegres y underground de Estados Unidos.

El australiano D.D también sabe hacer baladas como “In the water” con guitarra acústica como único recurso primordial y una voz más genuina, natural; coros lejanos y un final desgarrador.

El dance pop se hace presente en “Cortisol”, aquí queda claro que D.D ha encontrado los ingredientes ideales para que su álbum debut sea elegido por los mejores clubes nocturnos.

Un gran deslave de magia surge en “King Franco Picasso”, cuando el dancefloor nos hipnotiza y eleva con un teclado misterioso y bombos agitados que harán mover los hombros y pies de cualquiera.

“The Day I first found god” y “Toxic City” no están lejanas al mood ochentero que está regresando a la industria, tienen algunos leads de playa, esos chasquidos y esas desavenencias de cuerdas infalibles.

“Brother” ya nos acerca al trabajo de Unknown Mortal Orchestra; incluso es más admirable que solo una persona sea capaz de crear tanta magia, tantas ideas y sonidos experimentales. En este track hasta percibimos leads orientales que en combinación con el funk, convierten a D.D Dumbo en una especie de maestro de la mezcla.

“Oyster” es esa pieza al final de un juego de jenga; el momento preciso para las despedidas después de haberla pasado tan bien; una balada folk para hacer una pausa y esperar con ansias el segundo álbum de D.D Dumbo.