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La vida, vista desde arriba, podría resumirse en una serie de decisiones que debemos afrontar y aceptar día a día, pero es interesante pensar que el camino que tomaste a temprana edad, aún pueden influir en tu vida de una manera en la que, tal vez, nunca esperaste. Viejas pasiones reviven con el paso del tiempo y nos ayudan a crear-nos como humanos y como profesionales, que entregamos todo de nosotros en las oportunidades y posiciones en las que nos coloca la vida.
Para este perfil, tuvimos la fortuna de platicar con Cinthya García Leyva, investigadora y gestora cultural que actualmente dirige Casa de Lago UNAM, uno de los recintos que más apertura muestra ante los proyectos de experimentación sonora, demostrando la gran labor de Cinthya y su pasión por la exploración de los horizontes infinitos del sonido.
Yo me definiría como una gestora cultural y como una investigadora que le interesa mucho el sonido y las prácticas experimentales interdisciplinarias. Ha sido todo un goce para mi el ir descubriendo la amplia posibilidad de trabajo en México, ya que se pueden cruzar distintas propuestas de artistas con trayectorias muy diferentes, muy diversas y con contextos que no tienen nada que ver, para construir nuevos lenguajes y nuevos conocimientos”.
Si tuviéramos que usar una sola palabra para definir el trabajo de Cinthya, sin lugar a dudas sería “interdisciplinario”, ya que es una palabra que no solo define a su carrera, sino que también la podría definir a ella. Esto debido a que desde temprana edad ella se dedicó a estudiar y explorar el mundo de la música, desde la práctica y el academicismo, al estudiar guitarra en la Escuela Nacional de Música. Posteriormente, la vida la llevaría a estudiar Lengua y Literatura en la Facultad de Filosofía y Letras, donde encontraría su pasión por las artes literarias. Eventualmente, su carrera se fusionaría con su pasión por el sonido, abriendo un mundo de posibilidades para explorar.
Por un momento me alejé del mundo de la música y me adentré más al mundo literario. Pero recuerdo que cuando conocí el concretismo brasileño, donde la capacidad de pensar que significaba un poema se puso en jaque, y estos poetas concretos brasileños pusieron en discusión lo que significaba la palabra escrita, la palabra sonando, el sonido, la palabra y la palabra en su dimensión material. Cuando tuve ese encuentro, fue como una manera para mí de regresar al sonido desde otros espacios posibles; desde lo material, desde justamente aproximaciones del silencio, el residuo, los conceptualismos en poesía”.
Actualmente, Casa de Lago UNAM se posiciona como uno de los recintos culturales más fuertes y con mayor apertura a la escena musical capitalina, pero cuando Cinthya tomó la dirección, se enfrentó a un reto de dimensiones nunca antes vistas; la pandemia del 2020 a un mes de comenzar su gestión.
Fue un reto inmenso, comenzar una gestión a la distancia y luego hacer un proyecto que siguiera cobijando a la Casa del Lago y a los programas propuestos desde un inicio; eso fue un aprendizaje tremendo. Pero no solo para mí, sino para el equipo entero, duplicamos, extendemos y sumamos nuestras labores, para volvernos expertos en los nuevos ecosistemas digitales. Me gusta ver la gestión cultural no solo como un proyecto administrativo, sino también como un proyecto creativo”.
Otro elemento que destaca dentro de la trayectoria de Cinthya García es su basta participación en talleres y charlas internacionales, en las que continúa con su labor enfocada a la difusión cultural, al compartir y exponer el trabajo que se realiza en México y en nuestra capital, la cual se posiciona como una de las mayores capitales culturales del mundo.
“Para mí ha sido súper importante notar en los últimos años la atención que tienen otros países, sobre lo que se hace en México y el conocimiento que se empieza a tener, porque no siempre fue así. México se ha convertido en uno de los focos culturales más relevantes del mundo y ahora, algo bien interesante que está pasando, es una conectividad mayor latinoamericana desde un respeto intelectual y una crisis económica compartida que, sin embargo, ha producido grandes proyectos intelectuales y grandes proyectos artísticos”.
Casa de Lago UNAM es un espacio cultural ubicado en el corazón de la Ciudad de México, con más de 70 años de historia; años en los que ha evolucionado su uso, el mismo espacio y la propuesta cultural que acoge dentro de sus muros. Ya con cuatro años al mando del recinto, Cinthya nos comparte cómo fue tomar el espacio y transformarlo en un lienzo en blanco para el despliegue de su visión creativa.
Este es un espacio complejo que requiere mucha energía y, a la vez, es un privilegio total, porque estás en un lugar muy flexible; arquitectónicamente hablando. Tiene jardines, foros, foros abiertos, salas de cine, espacios para cursos y talleres, además de que tiene una ubicación privilegiada en la que puedes ver a las familias en las lanchitas, mientras disfrutan de un espectáculo visual y sonoro muy bello. Llegué y descubrí un espectro amplísimo de públicos y un espacio noble y permisivo”.
Cinthya es una persona que ha creado y aprovechado sus oportunidades, y se establece como una de las pocas mujeres que cumplen con un papel directivo dentro del circuito cultural de la capital, situación que la posiciona como todo un modelo a seguir para las nuevas generaciones de mujeres apasionadas por la creación, difusión y administración de la cultura nacional.
“Siento que, como mujer, debes trabajar mucho más para destacar dentro de esta industria. A las mujeres, y más a las mujeres jóvenes, se nos exige el doble o el triple para estar más o menos en una discusión horizontal con figuras masculinas de mayor edad. Yo me siento involucrada en muchísimas luchas feministas, porque gracias a eso se empiezan a cerrar brechas y sí se han dado cambios increíbles, pero también hay una realidad muy complicada todavía. Se requiere un esfuerzo fuerte y se requiere un trabajo constante, eso no hay duda, pero que sí hay espacios que permiten un gran desarrollo y ahora es un momento propicio para empujar desde el conocimiento de las crisis”.