Modest Mouse: recopilando los años

La vista aérea de una unidad habitacional podría resultar algo muy estético para muchos por sus valores arquitectónicos y funcionales, pero para Isaac Brock de Modest Mouse, representa un hermoso patrón de destrucción: “Podríamos pensar que muchos animales son malvados, pero ninguno supera al ser humano”.

Justo esa imagen de contrastes fue el icono del regreso de Modest Mouse al ser la portada de su más reciente producción Strangers To Ourselves, primer material tras casi una década de no lanzar disco nuevo. Esta larga espera no impidió que en el inter salieran de gira, incluso nos visitaron como parte del efímero Festival 72810 en Cholula.

También durante este paréntesis se dio el fenómeno de que el proyecto se convirtió en una puerta giratoria en donde varios miembros originales -o valiosos como Johnny Marr- se salieran para darle cabida a nuevos talentos. Por lo mismo, al escuchar este disco es como una compilación de muchos años, así que le preguntamos a Isaac si sentía que el resultado final era un viaje en el tiempo: “Fue un proceso muy largo. Cuando empiezo un proyecto me preocupa que lo que haga esté dentro del mismo concepto y más porque estas canciones tenían esperando mucho tiempo para que fueran escuchadas. Afortunadamente me siento muy contento con el resultado”.

El regreso como tal se mantuvo muy secreto. Las únicas pistas fueron algunos conciertos el año pasado, en donde curiosamente durante su presentación en el Fun Fun Fun Fest hubo un meteoro que iluminó la noche por unos instantes mientras tocaban “Dark Center Of The Universe”.

Los que mantuvieron la fe de que regresarían fueron los primeros en enterarse, ya que les llegó algunos una copia del sencillo “Lampshades On Fire” un día antes de que el mundo supiera de la existencia de Strangers To Ourselves: “Ya quería mostrar lo que hicimos, así que decidimos saltarnos el proceso burocrático que implica una nueva producción y regalarlo directamente a algunos de nuestros fans”.

Al escuchar Strangers To Ourselves uno se da cuenta de la energía acumulada en los años, ya que hay canciones muy ambiciosas en él. La más evidente es “Pistol”, la cual nos confesó Isaac que fue una de las cinco canciones con las que más se enganchó en el proceso de selección final del tracklist: “Esta canción es importante porque gracias a ella conseguimos la estructura del álbum”.

Otras sorpresas de este material es “Ansel”, el cual es una historia de un viaje de verano con su padre al deambular en su camioneta, y “Sugar Boats”, que posiblemente sea en donde encontremos una esencia más pura de Modest Mouse: “Fue difícil grabarla para alcanzar lo que queríamos”, finalizó Brock.