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“Nunca las cosas son totalmente blancas o totalmente negras, yo creo que uno tiene que ir encontrando los caminos para cada condición que se presenta”. Así lo dijo José Manuel Aguilera, líder del grupo de rock La Barranca, en una charla con Indie Rocks!
Ante un panorama sombrío y lleno de incertidumbre por la pandemia, La Barranca saca a la luz un nuevo disco este 2020, el tercero después de Fragor y Nocturno; el primero fue un proyecto de casi cuatro años en un formato y sonido completamente diferente, acompañados nada más y nada menos que de la Banda Sinfónica de Aguascalientes; un trabajo muy complejo que implicó involucrar a muchas personas, hacer los arreglos específicos para cada una de las piezas y lograr que realmente todas las canciones fueran adaptadas para que las tocara la sinfónica más que ellos.
Para el formato de la banda sinfónica, que es algo que no se había hecho, a mí me pareció de entrada un honor, pero también una idea extrañísima que no me imaginaba que podía llegar”.
Fragor encajó en un año difícil en donde La Barranca tuvo, sin pensarlo, una especie de actividad discográfica. Después apareció Nocturno, un álbum tampoco planeado por la banda que, al igual que Fragor, son trabajos que miran hacia el pasado. Entre ambos discos se creó una panorámica de 180 grados al ser Nocturno una mezcla completa de remixes.
“Son dos cosas bien diferentes, pero tienen en común que el punto de partida es la música de La Barranca y que salen los dos este año, pero eso no fue tan planeado originalmente”.
A pesar de la pandemia que sacudió al mundo entero, Aguilera enfocó al 100% su atención en hacer más música, en crear y escribir, al final es lo que todos los músicos hacen: toman su instrumento y se quedan horas con este tratando de resolver cada canción o cada disco que se va haciendo.
Al ver noqueada una de las avenidas principales que es la de hacer conciertos y tocar en vivo, La Barranca no tuvo otra opción más que pensar en esa otra avenida, en la de producir más música.
“Normalmente uno siempre está resolviendo cosas que tienen que ver con la otra parte de la actividad musical, planear conciertos, ensayos… y ahora nada de eso era posible, de alguna manera las condiciones de la pandemia, en lo personal, me permitieron concentrarme más y hasta yo decía de broma que por primera vez en la vida podía ser artista al cien por ciento”.
Tanto para La Barranca como para la gran mayoría de otras bandas, este año ha sido complicado, sin embargo, ante la cancelación de eventos importantes, entre los que se encontraba un concierto en el Teatro Metropólitan, Aguilera logró encontrar los caminos para coincidir en el trabajo creativo de un nuevo disco.
Entre la niebla no estaba planeado, pero se terminó a tiempo para ser presentado antes de concluir el año, y a pesar de ser un álbum relativamente rápido que tuvo como única invitada a Cecilia Toussaint, el trabajo entre escribir, hacer en paralelo los arreglos y encontrar medios eficientes para integrar este proyecto, es lo que le da a Entre la niebla un toque rockero con una sonoridad más de grupo que crea un contrapeso y queda justo en el centro de los otros dos discos.
Primero intentamos, utilizar todas esas plataformas nuevas que hay de compartición de archivos, conferencias zoom y todo ese rollo, no me gustó para nada, en el caso de los músicos nada sustituye la experiencia y la emoción de encontrar entre todos una solución para cada canción”.
El nombre Entre la niebla es una metáfora que coincide con lo que ha sucedido este año sin ser ser para nada una crónica de la pandemia, es simplemente una respuesta inmediata de La Barranca a este extraño 2020.
“Este año, entre las muchas cosas que nos ha enseñado, es que es bien difícil ver hacia delante, como que la visibilidad está turbia porque no sabemos qué va a pasar, es un poco eso, cómo moverte, cómo existir, cómo vivir o qué se siente estar en este mundo que de pronto resulta un poco impredecible aunque siempre lo es, no es algo exclusivo de la pandemia, sino creo la pandemia exacerbó ese tipo de incertidumbre que siempre existe hacia el futuro”.
Con una presentación sin público desde el Teatro Diana de Guadalajara, y experimentando esta nueva modalidad de realizar conciertos vía streaming, es como La Barranca cierra el año, haciendo un recorrido panorámico de todos sus discos en un escenario diferente el domingo 20 de diciembre a las 20:00 H.
“En muchos sentidos es un experimento, porque no lo hemos hecho antes, no sabemos si quiera cómo vamos a reaccionar nosotros mismos al estar ahí sin gente, es cerrar un poco como un volado, pero las cosas se acomodaron para que así fuera y hay que tomarlas”.