137522
Entrevista con Fermín IV

Entrevista con Fermín IV

Tan cerca de Dios como del rap.

Hablar de Fermín IV es hablar de historia. Se trata de uno de los pioneros del hip hop en México. Sí, antes de que te prendieras con Lng/SHT o Tino El Pingüino, existía Fermín y su grupo Control Machete.

Su presencia es impactante. Un tipo alto, serio y con cara de pocos amigos. Sin embargo una vez que empieza hablar te das cuenta que antes que rapero, antes que buen escritor, antes de pastor, se trata de un ser humilde, centrado y bueno, con un corazón gigante dispuesto a enseñar al mundo su visión de la vida.

La razón por la que me encuentro sentado en una azotea con él es porque después de más de una década se encuentra de regreso en la música y no hay forma de iniciar la plática más que con un ¿cómo te sientes de regresar?

“Por un lado nervioso porque dependo de mí mismo y emocionado porque cuando compartes escenario con alguien más te limitas. Me tengo que ganar el lugar, el hecho de hayan sido tantos años hacen que me sienta un poco como novato”.

Pues sí, es normal ese sentimiento, a pesar de que no es la primera incursión solista del rapero, su primer disco ya tiene más de una década y Fermín tiene que acostumbrarse a caminar de nuevo por esta industria. De hecho cuando se le pregunta por qué se tardó tanto en regresar a los escenarios te voltea la pregunta.

“Más bien la pregunta es por qué volví a la música. Siempre me ha gustado la música y no había tenido la oportunidad de volverla a hacer, primero porque puse como prioridad la iglesia, y era algo que tenía que hacer y ha sido algo muy fructífero. El problema era que no sabía manejar la industria, no sabía ni a donde subir mi música y fue hasta que Sony llegó que lo pude hacer”.

Y bueno, hasta este punto todo iba bien, sin embargo Fermín tuvo que enfrentar su estatus de leyenda, algo que no fue fácil de hacer. “Lo malo que topé fue que cuando empecé a contactar beatmakers, después de que se les pasaba el shock de que les estaba escribiendo me mandaban bases muy parecidas a las que hacía en Control, parecía que me querían complacer cuando en realidad yo los había contactado por que me gustaba lo que estaban haciendo. Entonces les tuve que explicar que lo que quería era que me retaran, que me sacaran de mi zona de confort. Por ejemplo hice un huapango y me tardé un par de semanas en encontrar el flow adecuado”.

Sin embargo existía un reto más para cumplir. El hecho de enfrentar una escena que no necesariamente es compatible con su creencias y valores. ¿Cómo le puede hacer para llegar a una generación que llegó al rap a través de una temática llena de sexo, drogas y violencia?

“No quiero ser el papá regañón. Pero quisiera poder escuchar un rap nacional que pueda escuchar con mis hijas. Por ejemplo, lo que haría sería retar a un rapero actual a escribir sin groserías, ya que les aseguro que hay un sector que no siempre quiere escuchar cuantas lineas te metes o con cuantas mujeres te acuestas. Por ejemplo con ellas me siento cómodo escuchando a Nach o SFDK e incluso algunos temas de Mike Díaz”.

“Yo creo que mis años como pastor me van a ayudar. Por ejemplo yo vivo mi cristianismo muy real y entiendo que la gente piense que la religión solo quiere dinero. Creo en el cristianismo razonado. Por ejemplo en mi caso no decidí convertirme por un problema de drogas, fue la muerte de mi abuelo la que me hizo preguntarme: ‘¿a dónde fue?’ y después me pregunté: ‘¿A dónde voy yo?’ y eso fue lo que me hizo acercarme, ya que en general tenía todo lo que quería, fama y dinero”.

Sobre Control Machete y su legado, Fermín piensa que aquel clásico Mucho Barato, ya no lo representa. "Personalmente no me siento identificado con el primer disco. El segundo fue más consciente, más maduro. El problema fue que pensé que nadie lo iba a comprar. Si me hubieran dicho que lo que iba a pasar le hubiera puesto más empeño. El segundo disco, por ejemplo, no dice groserías y eso que aún no era cristiano”.

La charla concluye con una declaración certera acerca de un reencuentro con Control. “La música que hacemos es muy distinta y yo apenas estoy empezando, Pato ya tiene cuatro discos, déjenme empezar de nuevo antes de pensar en un reencuentro”.

Por lo pronto Fermín IV se presentó el 28 de octubre en el Lunario, donde adelantó, sonaron un par de canciones de Control Machete.