Favoritos
Haz click en la banderilla para guardar artículos en tus favoritos, ingresa con tu cuenta de Facebook o Twitter y accede a esta funcionalidad.
"El mundo se va a la mierda y no he hecho nada". Y es que a veces, la desesperanza es tal, que parecería que no hay luz al final del túnel. Al menos así ve el horizonte Alex Anwandter, quien ha acumulado –entre su tiempo como vocalista de Teleradio Donoso y como solista– más de 10 años de carrera musical. A través de la que expresa sus reflexiones sobre la situación actual del mundo y los problemas más cercanos a él, con canciones sobre la sexualidad, el machismo o la política en Chile. Pero cantar sobre tanta mierda que hay en el mundo y estar consciente de lo que sucede a su alrededor durante tantos años, inevitablemente lo ha vuelto un poco loco.
Bajo este contexto surge “Locura”, el primer sencillo de su próximo álbum. Porque si la ignorancia es una bendición, estar asiduamente consciente de todo lo que nos rodea, puede llegar a ser completamente enfermizo. En entrevista para Indie Rocks!, Anwandter nos contó lo que hay detrás de esta canción, que se presenta de forma bailable y pegajosa, pero con un fondo realmente negativo.
"'Locura' es una respuesta a lo que sucede actualmente en el mundo, a la manera en la que consumimos toda la información y a lo difícil que es relacionarse con todo eso. Porque al final, resulta nocivo para la salud. Nuestros cuerpos no están hechos para soportar estos niveles de estrés que vivimos, para la exigencia del sistema económico y, encima, si tienes un poco de consciencia sobre otras personas que están sufriendo y te preocupas e intentas hacer algo, es como remar a contracorriente. Honestamente, yo no veo una solución en el horizonte, vivimos en un momento particularmente oscuro de la historia. Quizá no estamos en medio de Guerras Mundiales, pero éstas se trataban de solidificar sistemas ideológicos; en cambio, ahora vivimos en uno que ya está más que solidificado, y es terrible, no hay para dónde cambiarlo. Así que me da un poco de vergüenza admitir que hice una canción, quizá no derrotista, pero que tampoco pretende cambiar el mundo".
Si bien la música del chileno no es la clave para resolver los problemas mundiales, es una forma de protesta que pone los temas difíciles sobre la mesa. Además, es también una forma de expresión que ayuda al propio Alex a lidiar con todo lo que sucede a su alrededor y no volverse loco.
"La canción misma tiene una pequeña clave que es como mi manera de pelear. Y mi manera de pelear es… ser. Ser lo que uno dice que es y expresar lo que le importa. Yo lo hago a través de pequeños guiños como en el coro de esta canción, que está cantado con prenombre femenino. De esta forma, busco metafóricamente mover la línea, empujar un poco lo que se puede y lo que no se puede hacer. La canción no trata de mi sexualidad o de mi género, pero sin ninguna explicación, le tiro un hueso a los homofóbicos o a los machistas y canto la canción como una mujer. Siento que esas son el tipo de tácticas que nos quedan disponibles: existir de la manera en que queremos sin disculpa y asumiendo el riesgo. Para mí el riesgo es enfrentar una ola de burla y homofobia, pero estoy completamente dispuesto a que venga. Y viene con algún grado de amenaza a mi integridad física, solo por ser más femenino y caminar por la calle y andar cantando canciones sobre lo loca que me siento. Pero ser, es lo único que nos queda para pelear".
A pesar de que Alex se ha vuelto reconocido por su discurso controversial desde sencillos pasados como “Mujer” o “¿Cómo puedes vivir contigo mismo?”, otro común denominador en su narrativa, es la forma en la que adereza la crudeza de las letras con synth pop y guiños de disco setentero, volviendo su música completamente bailable y fácil de descontextualizar. No obstante, en palabras del músico, al final todo es parte de un performance.
"No siento que esa pelea que quiero dar, pueda venir en forma de lamento, porque el lamento automáticamente se relaciona con una preocupación por uno mismo, por lo triste que me siento. Y lo que yo quiero retratar va más allá de mí. Lo bailable tiene una cosa más desafiante que solo dejarme crecer la barba, tocar guitarra acústica y hacer una cosa letárgica aburrida. Lo que yo hago es más performático. Es igual que cantar la canción con pronombre femenino, hacer algo bailable lo vuelve desafiante. Y esto incomoda a la gente, si revisas los comentarios en YouTube de cualquier canción mía de los últimos siete años o más, uno de los grandes reclamos con respecto a mi música es sobre lo gay que se ha vuelto. Al final, musicalmente hablando, he hecho lo mismo, es solo que el componente ideológico le resulta intolerable a los intolerantes".
Salirse de la zona de confort y tratar temas polémicos no es nuevo para el chileno. En Amiga, por ejemplo, hace críticas al sistema capitalista en canciones como “¿Qué será de ti mañana?” y referencias a la historia política de Chile en “Cordillera”. Dos años después, Anwandter expande su territorio geográfico con un cuarto disco de estudio llamado Latinoamericana, que verá la luz en octubre de este año. Con este nuevo material, Alex Anwandter continúa alzando la voz e invita al escucha a reflexionar sobre lo que sucede en la actualidad a través de tabúes, performances que incomodan a aquellos de mente cerrada, y composiciones relativamente negativas. Y quizá esto no sea suficiente para transformar al mundo. Quizá solo nos vuelva más locos. Pero al menos, es un primer paso para gestar un cambio.