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El Teatro Metropólitan albergó anoche el tour “No voy a decir que no” de Ximena Sariñana; una de las mujeres mexicanas más talentosas de nuestra era que presentó un show en el que se le mostró energética y muy emocionada por poder actuar en este recinto. Clemente Castillo de Jumbo fue el telonero presentando canciones de su álbum Eureka y un excelente cover de “Calaveras y Diablitos” de los Fabulosos Cadillacs.
Acompañada de su banda vestida de blanco, la jalisciense salió para comenzar el concierto con “Parar a Tiempo”, mostrando una gran presencia escénica que cautivó a todos de inmediato. A ésta le siguieron “Cuando Mientes” y “La Vida No Es Fácil”, que fueron bien recibidas y coreadas por los fans.
Después de tocar “La Tina”, apareció como invitado sorpresa Juan Manuel Torreblanca para sentarse al piano e interpretar “No Voy A Decir Que No” junto a Sariñana. Uno de los momentos más emotivos y agradables del evento se vivió cuando Ximena recitó “Las Huellas”, la famosa canción de la película “Amarte Duele”, de la que aún se le recrimina la muerte de “Renata”, situación con la cual la también actriz bromeó.
Por primera vez en sus presentaciones, la mexicana sorprendió a todos con la interpretación de “Aire Soy” de Miguel Bosé, acompañada de su guitarrista Alex Ferreira, lo que el público agradeció, aplaudió y coreó. A ésta le siguió la melosa “Ruptura”, una canción de amor no correspondido, situación con la que afirmó sentirse plenamente identificada.
El clímax llegó con la interpretación de “Un Amor/ En Medio De La Noche” en un silencio increíble, admirando a la cantante sentada al piano y con una voz visceral; a este momento tan especial le siguió la colaboración con Clemente Castillo en “Monitor” (originalmente de Volován).
El ánimo del concierto no decaía aún, cuando la intérprete decidió sacar sus cartas más fuertes en “Sin Ti No Puede Estar Tan Mal”, el hit del álbum No Todo Lo Puedes Dar, y “Vidas Paralelas”, una de las más populares de Mediocre.
El momento cumbre llegó evidentemente tras el encore en colaboración con Juan Manuel Torreblanca y Clemente Castillo interpretando “En Clave”, una canción nueva con Sariñana en el piano y ellos acompañándola en las voces.
Con un arte visual minimalista y una simplicidad que hacía resaltar aún más el talento de la representante del pop folk, la noche fue un éxito. Siempre agradecida, Ximena Sariñana dejó el alma en el escenario y enfatizó en la importancia que tenía esta presentación para ella. Su carrera va en ascenso y el Teatro Metropólitan fue un escalón firme para alcanzar ese objetivo.