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The Mars Volta en el Pepsi Center WTC

The Mars Volta en el Pepsi Center WTC

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Pepsi Center WTC

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La banda emblema de la generación MySpace recuerda su era dorada con una dosis de nostalgia energética.

La nostalgia es el mejor negocio del mundo y The Mars Volta lo sabe. El combo fue parte fundamental del soundtrack de toda la generación MySpace. Su fusión de punk explosivo junto a las complejas estructuras del rock progresivo y percusiones latinas le dio frescura a la música del nuevo milenio. ¿Pero dos décadas después de su primer álbum todavía le queda energía a la banda?

El anuncio del regreso a México de Omar Rodríguez-López y Cedric Bixler-Zavala fue una sorpresa porque apenas hace unos meses su grupo encabezó el festival Hipnosis 2022. Pero a diferencia de un concierto masivo, las presentaciones en solitario son un pretexto para tener una mayor cercanía con los artistas y poder disfrutar de conciertos más extensos.

Rock sencillo y bien ejecutado para abrir bocado

Al igual que ocurre con la comida, antes del plato fuerte está el aperitivo. En este caso la mexicana-americana Teri Gender Bender fue la encargada de abrir el show. Ante los puntuales que acudieron al recinto ofreció una dosis de rock descarnado y sin malabarismos. Su estilo se alimenta de la versión más poderosa PJ Harvey y la menos estrafalaria de Björk.

Con un bigote falso sobre sus labios, la cantante se sacudió sobre el escenario al estilo de Linda Blair. Para completar la formación sobre la tarima tiene el respaldo de músicos de primer nivel que combinan la fiereza con pequeñas dosis de psicodelia. Dentro de sus compañeros se encuentran un par de integrantes de la familia Rodríguez-López y en los tambores está Audrey Paris, quien también es parte de La Luz.

Al finalizar, Teri terminó descalza al aventar sus zapatillas a un par de fanáticos que ahora tienen el souvenir más extraño de la noche. Después de algunos minutos para cambiar los instrumentos y recargar energía llegó el momento estelar del concierto. Por fin se pudo ver a The Mars Volta en solitario de nuevo en la CDMX.

Punk progresivo con olor adolescente

Es una realidad que la dupla fundadora del conjunto ya abandonó su etapa de rebeldía y efusividad para transformarse en “adultos contemporáneos”. Ya no hay brincos sobre el escenario ni desplantes de indisciplina. Ahora ambos se comportan de una forma correcta porque el cuerpo ya no es el mismo que cuando destrozaban los escenarios con At The Drive-In.

The Mars Volta_Pepsi Center WTC_David Durán (6)

Pero aunque la forma no es la misma, en el fondo lo que realmente importa es la música. Con esto en mente, durante la actual gira el proyecto de El Paso le ha dado protagonismo a su álbum De-Loused in the Comatorium por su vigésimo aniversario. Es el trabajo del que se desprenden más canciones en cada concierto y la primera en sonar fue “Roulette Dares (The Haunt Of)”. La furia sonora fue la misma que en sus años de gloria aunque por desgracia la acústica del lugar jugó en contra de todos los asistentes.

Si algo no ha cambiado con el tiempo es la nula interacción de los miembros con los asistentes. Cada tema se ejecuta uno tras otro y no hay tiempo para ofrecer palabras a la audiencia. Puede ser bueno o malo pero aquí la prioridad es la música.

Por otra parte, los trabajos recientes del combo son los que tienen menor impacto en la actual gira. En cada noche apenas suenan un par de temas y son las que tienen un menor recibimiento entre la audiencia. Dejar de lado la música híper explosiva para crear temas convencionales no fue la mejor decisión pero no fue un impedimento para que los fanáticos más fieles acudieran al concierto.

Por otra parte, uno de los momentos de mayor catarsis llegó con “Cicatriz ESP”. La pieza fue concebida para mostrar las experimentaciones en la guitarra de Omar y durante su ejecución en directo la máxima duda es si realmente todo es improvisación o si está perfectamente planeado.

Pero en la vida todo tiene un comienzo y un final y en este caso “Son Et Lumiere” e “Inertiatic ESP” marcaron la conclusión de la velada. No hubo encore ni falsas sorpresas de regresar al escenario para interpretar más canciones. Para todos los ansiosos de recordar su adolescencia fue un concierto perfecto porque de nuevo pudieron escuchar las canciones con las que descubrieron a The Mars Volta durante la última era dorada de MTV.