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La noche del miércoles 27 de octubre fue particularmente especial. El día había sido lo suficientemente caluroso y, a comparación de otros días donde todo cambia al anochecer, en esta ocasión el bochorno perduró y se encerró en las cuatro paredes del Foro Indie Rocks! El ambiente parecía una jungla e incluso resultaba sofocante para muchos, sin embargo esta desesperación por querer correr a un sitio más ventilado cedió luego de que la cantante chilena, Rubio arribara al escenario de este venue que la había esperado ansiosa.
Sin embargo, las cosas no ocurrieron tan deprisa. Las puertas del recinto se abrieron en punto de las 19:00 H y fue entonces cuando la gente decidió acomodarse en algún espacio de esta sala. Los minutos avanzaban y mientras continuaba llegando la gente; la banda abridora, Azain, se fue acomodando en el escenario. Vestidos con trajes blancos con destellos fluorescentes, la agrupación dio inicio a su presentación que principalmente destacó por crear una atmósfera alterna repleta de experimentaciones que lograron que todos los presentes partieran a otra realidad; una representación perfecta de aquello que ellos mismos suelen llamar "sueños". Entre sus historias paralelas resonaron temas como "Canción Para Estar Siempre Juntos", "Canción del Futuro", entre otros de los éxitos de su más reciente álbum de estudio Sincronizaciones Paralelas (2020).
El acto principal culminó y dejó a los asistentes empapados de una gran energía que debía explotar con Rubio. Lamentablemente la espera para verla fue demasiado grande. Cerca de las 20:00 H la artista chilena se hizo presente en el Foro Indie Rocks! portando un elegante traje en color azul. Resplandeciendo, dio inicio a esta presentación con "Coral", mientras el público coreaba al unísono. Tras una saturación en la batería y unas fallas de sonido, la melodía fue avanzando hasta culminar. Quizá el inicio no resultó perfecto pero lo que continúo fue crucial para esta velada.
De esta manera continuaron temas como "Ir", "Oro", "Mango Negro", "Nudo" y "La Especie"; cada interpretación se sentía diferente e irradiaba una efusiva electricidad que mantenía a la gente atenta a todo lo que estaba aconteciendo. Las luces de colores parpadeaban al compás de los temas construyendo una atmósfera compleja y surreal. Tras una selección acertada de temas, la cantante decidió improvisar con un juego de sonidos hipnóticos que emocionó a los asistentes. Su set se extendió hasta lograr el clímax y así fue como fue la noche empezó a cerrar.
Entre el calor de la sala, resonaron con facilidad "Hacia el fondo", "Pájaro Azul", "Seres Invisibles", "El Fruto" e "Inverno" dejando a todos con un nudo en la garganta y unas ganas inmensas de comerse al mundo. Durante su presentación en la CDMX, Rubio brilló más que nadie mientras se desenvolvía a través de oscuras y experimentales ondas sonoras disfrazadas de naturaleza.