Favoritos
Haz click en la banderilla para guardar artículos en tus favoritos, ingresa con tu cuenta de Facebook o Twitter y accede a esta funcionalidad.
Presenciar un duelo de freestyle es como asistir a un combate de boxeo en donde los contrincantes portan micrófonos en lugar de guantes y se atacan con rimas en lugar de puñetazos. Aquí los versos fluyen con la misma agresividad de un jab a la mandíbula y aturden más que un gancho al hígado. Aquí no importa el tamaño ni el peso del rival, aquí todos son gallos.
La gente que asiste a las batallas que Red Bull organiza desde hace 10 años lo entiende perfectamente. Conoce el poder de las palabras, sabe apreciar un punch line bien ejecutado, una respuesta contundente ideada al calor de la improvisación. Sabe que en el rap la rima es más fuerte que la espada.
Por eso cuando en la Carpa Astros dieron las seis de la tarde y el evento no comenzaba, la agitación podía sentirse en los gritos y silbidos de cientos de fanáticos ansiosos por apoyar a su gallo favorito. La lista de competidores era una amalgama de la vieja y nueva escuela que auguraba una exhibición de estilos de todo tipo. Ahí estaba Jack Adrenalina, viejo lobo de rap con sus respuestas instantáneas, Dominic Girt, uno de los favoritos, freestyler joven, pero consumado famoso por su flow y por sus punch lines ineludibles, Big T antiguo rival del mismísimo Aczino que desde hace años trata de labrarse un campeonato en la escena, RC The Freestyle Killa, otro favorito, amante de las metralletas y poseedor de una fluidez impecable y por supuesto Jony Beltrán quien con su estilo simple pero agresivo estuvo a punto de ser campeón internacional hace tres años.
El jurado compuesto por nacionales como Eptos, Danger y Adrián Salguero; internacionales como Skone y MCKlopedia prometía una calificación justa. La experiencia de Serko Fu como host de batallas presagiaba un público siempre entusiasmado. Al grito del clásico "Si yo digo Gallo, tú dices batalla", comenzaron los primeros enfrentamientos.
Los octavos transcurrieron en un altibajo de sorpresas y decepciones. RC perdió contra Verso Abstracto, por lo que la esperada revancha contra Dominic quedó descartada de inmediato; Troka venció sin dificultades a MR; Jony Beltrán dejó claro que iba por el primer lugar al vapulear a HL entre vítores del público; Fimo resultó ganador en un agobiante duelo con Craker; Dominic demostró por qué es uno de los favoritos del público y eliminó a Esek con una mano atada a la espalda; la vieja escuela de Jack se impuso ante la nueva de Curse; mientras que Munky anotó un punto para la nueva escuela al derrotar a un nervioso Lobo Estepario y Big T hizo lo mismo en un somero duelo contra Potencia.
Durante los cuartos de final sucedió la siguiente gran sorpresa de la noche cuando los jueces declararon vencedor al veracruzano Munky sobre el acapulqueño Dominic, quien demostró que el hip hop es hermandad ante todo y abrazó a su rival antes de despedirse de sus seguidores. A pesar de que otro favorito se iba de la lista aún quedaban Jack, Jony y Verso para garantizar buenos combates.
Jony Beltrán demostró su hambre de triunfo desde el principio, su duelo contra Verso Abstracto fue una prueba más de ello, los jueces lo notaron y le dieron su voto unánime. Lo mismo sucedió cuando Jack hizo gala de su ingenio para responder las rimas del rival y supo dirigir la batalla contra Munky hacia una victoria certera.
La final fue un emocionante duelo de la experiencia y la agilidad mental de Jack contra la perseverancia y la agresividad de Jony. La vieja escuela contra la sangre nueva. La oportunidad de Jack para vengarse de su derrota en 2013, la ocasión perfecta para que Jony reafirmara su supremacía.
“Con este verso voy a bajarte tu estatus, te regalo Yu-Gi-Oh! porque tú eres un Otaku”, rimó Jack sin que el público celebrara mucho. “Me habló de Yu-Gi-Oh! este payaso, tú eres como Exodia pues te dejo hecho pedazos”, respondió Jony Beltrán entre gritos que lo perfilaban como el vencedor.
Tras varios minutos de duelo y una réplica de cuatro por cuatro en la que Jhony conectó punch tras punch, los jueces y el público lo declararon vencedor ante un inconforme Jack quien alejado de sus compañeros que intentaban alzar en hombros a su rival, tomó el micrófono y se autonombró como el verdadero campeón de México.
Sin importar las polémicas desatadas por la decisión final, quedó claro que Jony Beltrán nuevamente es digno de representar a México en una final internacional. No tiene un panorama fácil, pues lo esperan rivales de la talla de Papo y Skone. Sin embargo, el sábado Jony demostró que no es el mismo de hace tres años, se nota más maduro, más centrado, ha aprendido de sus errores y esta vez tiene muy claro lo que son las Malvinas. Al parecer nada podrá tomarlo desprevenido, tiene buenas posibilidades de hacer lo que no pudo en la final internacional de Argentina.
La Final Nacional de la Batalla de los Gallos México 2016 demostró que la escena del freestyle sigue más viva que nunca, pues permanecen dignos representantes con experiencia en batallas y llegan nuevos talentos que dentro de unos años serán quienes pongan el nombre de México en alto.
¡Tenemos representante para Perú! Jony Beltrán 👊🏼🐓💥 #batalladelosgallos pic.twitter.com/bnyyQMTxKE
— #BatallaDeLosGallos (@RedBull_Gallos) 16 de octubre de 2016