Pitchfork Music Festival CDMX: Godspeed You! Black Emperor en el Frontón Bucareli

Ruidosas canciones de cuna para escuchar con los ojos cerrados mientras llega el final del mundo.

Existen grupos que hacen todo lo posible para ser populares y jamás lo consiguen. Mientras que hay otros como Godspeed You! Black Emperor que son tan extraños que logran captar la atención de una gran cantidad de personas. Su segunda visita a México es la muestra más clara del fanatismo que despierta el combo que ni siquiera tiene redes sociales oficiales.

Tuvieron que transcurrir siete años y varios sismos para ver al grupo canadiense de nuevo en suelo azteca. Aunque en esta ocasión fue especial porque fue uno de los headliners de la primera edición del Pitchfork Music Festival CDMX. Una nueva alternativa que busca dar proyección a los proyectos emergentes y consolidados de la música que no pertenece a un género en específico.

Los inicios de las revistas digitales de música

Cuando Ryan Schreiber creó Pitchfork en 1995 como una revista digital especializada en música recibió fuertes críticas porque la idea parecía descabellada. En ese momento se creía que internet era una moda pasajera y los medios impresos perdurarían por siempre. El tiempo se encargó de mostrar lo equivocados que estaban todos.

Como parte de la expansión del portal musical que ahora le pertenece al conglomerado Condé Nast ahora sus tentáculos se extendieron a otros puntos geográficos. Dentro de la segunda jornada de actividades hubo una fecha que acaparó la atención de todos los amantes de los sonidos experimentales.

Sonidos atmosféricos desde México para el resto del mundo

Después de un cambio de sede de último momento debido a la alta demanda de boletos el Frontón Bucareli recibió a Vyctoria. La banda capitalina se ha consolidado como una de las más interesantes dentro de las que realmente no pertenecen a una escena musical en específico… lo cual no necesariamente es malo.

El trabajo del combo es atmosférico y complejo a partes iguales. Sus piezas instrumentales hicieron que el recinto vibrara como si se tratara del Apocalipsis por el imponente volumen desprendido de las bocinas. Aunque por encima de todos los instrumentos siempre destaca el violín de Gibrana Cervantes, quien incluso aprovechó el final de su presentación para pronunciarse en contra de los feminicidios que ocurren a diario en México.

La suma de combinar todos los sonidos del mundo

Con un lugar muy cercano a su máxima capacidad aunque con una logística y distribución de zonas bastante extraña dio inicio el concierto de Godspeed You! Black Emperor. No hubo bienvenida ni palabras para conectar con el público. En ocasiones la música es tan potente que es suficiente para transmitir todo tipo de mensajes.

El conjunto fundado por Efrim Menuck siempre se ha distinguido por no seguir las reglas de otros. Es un hijo perdido de The Residentes y pariente lejano de Sigur Rós que trabaja con sus propias normas aunque implique no triunfar a nivel comercial. Nadie debe olvidar que la integridad y el prestigio son aspectos que no se pueden comprar con dinero.

Al igual que ocurre con sus álbumes, las versiones en vivo de sus composiciones son más largas que los sueños. Tienen principio y final pero todo lo que ocurre en medio es pura improvisación. Por momentos son relajadas como una canción de cuna pero de forma progresiva se convierten en marchas imperiales que suenan al final del mundo.

Los fanáticos más acérrimos pudieron escuchar algunas piezas emblemáticas como “Bosses Hang” y “The Sad Mafioso”. Desde que sonaron las primeras notas se desató un grito eufórico entre una parte del público, mientras que otros de inmediato exigieron silencio. El eterno debate entre la forma correcta de mostrar respeto en un concierto jamás terminará.

Por su parte, el regreso de los canadienses a México coincidió con la planeación de su nuevo material. Fue una fecha ideal para escuchar algunos temas inéditos que mantienen su esencia indescriptible aunque todavía no se inventa un adjetivo que pueda describir su estilo. Si el blanco representa la suma de todos los colores entonces la música de Godspeed You! Black Emperor es el resultado de combinar todos los sonidos del mundo.

En la vida nada es eterno y en un parpadeo de dos horas concluyó una presentación indescriptible que ninguno de los presentes podrá olvidar. Con esto, ahora el Pitchfork Music Festival CDMX tiene el fuerte reto de lograr un cartel superior para su siguiente edición. Parece algo demasiado complicado pero no imposible.

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