Favoritos
Haz click en la banderilla para guardar artículos en tus favoritos, ingresa con tu cuenta de Facebook o Twitter y accede a esta funcionalidad.
Como un oasis en medio de la ciudad en llamas, el Festival De Frente celebró su segunda edición en el Jardín Ponsá y reafirmó su lugar entre los eventos que mueven nuestra capital como un espacio innovador para la moda, una fiesta con estilo y una oda a la cultura del influencer.
De Frente no es un festival grande y lioso, es más bien una fiesta de concepto contemporáneo y a la carta; es un espacio pequeño en el que pasan muchas cosas. Si bien el escenario musical es uno de los focos principales, hay pequeños nichos que ofrecen muchas más opciones; desde rincones en los que puedes hacerte un tatuaje o pintar tu cabello, hasta otros donde puedes comprar una chamarra, pedir un trago o tomarte una foto dignísima de Instagram.
La mayor parte de la concurrencia inundó el Jardín Ponsá ya bien entrada la noche, pero desde las primeras horas de la tarde los escenarios no dejaron de desafiar el silencio. Ale Moreno de Ruido Rosa ofreció un set casi veraniego, perfecto para tener un coctel en la mano y recorrer el lugar. Desde Fujiya & Miyagi hasta The Clash, su propuesta fue una de las más consistentes y divertidas.
El estilo reinó el festival, había más moda abajo que arriba de los escenarios. Ninguno de los asistentes llevaba un atuendo incidental, parecía que cada uno de ellos estaba ahí para resaltar, para decir algo. Deslumbraban los palazzos espectaculares, los peinados alocados y las faldas cortas; la vibra de la concurrencia competía con las exposiciones de diseñadores que descendían de las pasarelas hasta los pasillos y los escenarios para convertirse casi en un performance.
El festival fluía en todas las direcciones cuando Timothy Brownie subió al escenario para dejar de lado el ritmo de tienda departamental y ofrendar su música a un público disperso, pero jamás inmune a los brownies y el beat casi espiritual de la agrupación. Ellos ofrendaron de regreso un poco de baile.
Ya entrada la noche, artistas como Pablito Mix y Sotomayor le pusieron el soundtrack a la concurrencia mejor vestida de los festivales de la ciudad para que siguieran la fiesta, admiraran a los modelos y se codearan con más de un famoso de Internet.
Más que un festival tradicional, De Frente es una fiesta multifacética, hermética y vibrante con buena música de fondo y muchos espacios exponer y descubrir nuevos estilos; una oportunidad de selfie asegurada.