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Con su show sinfónico en vivo, Alan Parsons y el equipo de seis músicos que le acompañó en el Auditorio Nacional de la Ciudad de México, lograron que los asistentes terminaran de pie y lo más cerca del entablado que les fue posible.
En punto de las 20:30 H., la Orquesta Sinfónica 5 de Mayo, originaria de Puebla de Zaragoza y dirigida por Tom Brooks, se encontraba en el escenario para dar inicio al show de la banda londinense formada por Parsons, el bajista Guy Erezen, Todd Cooper dándole vida al saxofón, PJ Olsson prestando su voz, Danny Thompson en la batería, y Jeff Kollman y Dan Tracey en las guitarras.
"Standing On Higher Ground" fue la primera de 20 canciones, y marcó el inicio de un show que duró aproximadamente dos horas, en el que Parsons deleitó a un Auditorio Nacional casi lleno, tocando versiones de las canciones que conforman la gira Symphonic Project.
Más tarde, pidió a todos los asistentes que le ayudaran con el coro de "Breakdown": “Freedom, freedom, we will not obey”. El primer intentó no salió como el músico esperaba, y luego de bromear con la audiencia al decirles que ‘cantaran como si les estuvieran pagando’, pidió que se pusieran de pie y trataran de nuevo.
A "Breakdown" le siguió "Don’t Let It Show", pieza en la que los siete músicos principales se alinearon al frente del escenario y realizaron una coreografía con sus instrumentos, causando que el público se pusiera de nuevo de pie.
La novedad en el show de Parsons, quien visitó México en el 2003 y 2011, fue que en esta ocasión incluyó en su repertorio musical el tema "Silence and I", que no había escuchado el público mexicano.
"Sirius" y "Eye In The Sky" marcaron el inicio del final de la noche. Con esta última, la agrupación logró que las personas que ocupaban los lugares más cercanos al escenario, se pararan y corrieran hacia el mismo, acto que el cuerpo de seguridad permitió y que los músicos disfrutaron, pues se acercaban para convivir con los fanáticos que ahora tenían a centímetros de distancia.
Fue una de las dos canciones más coreadas en todo el concierto, y después de la cual Parsons y sus músicos se retiraron. Las luces se apagaron y la audiencia pedía el regreso de la banda al escenario con aplausos, gritos y utilizando las lámparas de sus teléfonos inteligentes.
Parsons regresó para cerrar la noche con "Dr. Tarr & Prof. Fether" y "Games People Play", otra de las favoritas que sacó de sus asientos y puso a bailar a todos.
A pesar de que sus únicas palabras en nuestro idioma fueron “Hola México” y “Muchas gracias”, esto no lo detuvo de interactuar con sus seguidores entre canción y canción, dando una breve explicación como introducción antes de iniciar un nuevo tema.
Al día siguiente, llevaron el show al Auditorio Metropolitano de Puebla.