Favoritos
Haz click en la banderilla para guardar artículos en tus favoritos, ingresa con tu cuenta de Facebook o Twitter y accede a esta funcionalidad.
En septiembre de 1971 ocurrió un evento que quedó marcado en la historia de México; miles de jóvenes se reunieron para celebrar y ofrecer el mayor concierto de rock en la historia del país: Festival de Avándaro. Su nombre ha resonado con fuerza por diversas situaciones a lo largo de cinco décadas ya que representó un antes y un después para el rock mexicano. Con motivo de celebrar su aniversario número 50, Hipnosis y See Records unieron fuerzas para presentar en el Foro Indie Rocks, Avándaro 50 años.
A los amantes de la música y sobre todo a los coleccionistas siempre les viene bien sumar alguno que otro disco, vinilo, libro, cassette o póster de esa ocasión tan memorable y por ello es que los organizadores convocaron un bazar de discos para que la banda le cayera a rebuscar alguna que otra rareza. See Records, Fhauna, Reverb Records, Discodromo, Big Five, Vinil Azul, Garnica y Toño Pantoja (El Chopo) fueron los invitados a participar en este comercio en el que se encontraban títulos de Javier Batiz and The Famous Finks, Enrique Guzmán, Caifanes, Toncho Pilatos, La Revolución de Emiliano Zapata, Quinta Visión, División del Norte, La Tribu y más. Había de todo un poco y para todos los gustos.
Los coleccionistas encontraron un punto de reunión en el restaurante y se dieron la oportunidad de disfrutar de una comida mientras escuchaban al selector de vinilos. Por otra parte había algunos jóvenes asistentes que llegaron al venue con el interés de conocer más de Avándaro, revisando la exposición pictórica que se encontraba en el mismo lugar y la cual contaba con más de una decena de pintorescos cuadros que ofrecían al visitante una interpretación del rock; música, pasión, libertad, diversidad, color, paz y amor.
Por otra parte y quizá la más interesante de Avándaro 50 años, fue la presentación del libro Yo Estuve en Avándaro, presentado por Trilce Ediciones e Hipnosis. Federico Rubli ofreció una especie de conferencia virtual para compartir algunos de sus recuerdos del festival. Primero que nada aplaudió el trabajo de Graciela Iturbide, fotógrafa mexicana que capturó en imágenes este acontecimiento tan importante.
El economista y apasionado por la música explicó que la idea original no era hacer un festival, sino una fiesta. Los hermanos Negrete y el resto de los involucrados en este encuentro se cuestionaban la idea de hacer algo similar a lo vivido dos años antes en el White Lake de Nueva York. ¿Por qué no hacemos un festival tipo Woodstock? Increíble pregunta. Rubli mencionó que el 90% de los jóvenes asistentes fue por el llamado del rock, lamentablemente el evento se catalogó como un descontrol y hasta cierto punto se le puede decir que fue "castigado".
Festival de Avándaro, fue una gran hermandad y todo se compartía, hasta la mota. No fue una reunión de drogadictos perdidos, como dicen", explicó el escritor del libro.
Tras una hora de remontarnos a inicios de los 70, Federico Rubli cerró su presentación con una frase clave: “Viva el rock”, esperando que las nuevas generaciones se sumen a conocer dicho acontecimiento y a seguir manifestándose al compás de la música.