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Gel antibacterial. Sana distancia. El protocolo completo de sanidad al que nos hemos acostumbrado. Comprobante de vacunación o prueba negativa a COVID -19. El regreso a los eventos musicales masivos tiene un sabor agridulce. Entre cancelaciones por circunstancias diversas, todos ponemos de nuestra parte para recuperar un poco de las alegrías que quedaron suspendidas por el confinamiento.
Traída directamente desde Venus, HANA inaugura el escenario principal con un set electrizante. Mezclando secuencias espaciales con tesituras de voces femeninas, nos da un fugaz paseo de 30 minutos por la constelación de Andrómeda. Volvemos al planeta Tierra sanos y salvos con “We Appreciate Power”, el tema colaboración con su sister, Grimes.
“Pero el perfume de tu piel jamás que se me olvide...”. Cuco toma el teclado para acompañar a boy pablo en un hit que está por salir. El proyecto Chileno - Noruego hizo su debut en nuestro país en 2019 con un contundente sold out en el Foro Indie Rocks!. Dos años después regresa para cosechar los frutos de su álbum debut, Wachito Rico. Su combinación de guitarras tropicales, efecto flanger y una pizca slacker rock, nos transporta a un paraíso con vista al mar. “Dance, Baby!”. Dentro de muchos años, varios recordarán sus amores juveniles gracias al beach pop de Nicolas Muñoz y su equipo.
Con el cielo parcialmente nublado, la corriente marina nos lleva con rumbo hacia el noroeste para desembarcar en el escenario Corona Cero. Con su acento típicamente inglés, SG Lewis nos recibe sobre la arena y nos obsequia un collar de flores exóticas y una piña colada. El joven de 27 años que, recién este año presentó su primer larga duración, luce notablemente contento de percibir el calor del público mexicano. Tras unos cuantos temas, tomó su guitarra y se bajó de la mezcladora y explotó el baile con sus “Chemicals” que entraron directamente en nuestro torrente sanguíneo.
Para las 17:00 H, el calor del sol, que en ningún momento se sintió abrazador, comenzó a perder intensidad. La afluencia de gente fue notablemente menor que en ediciones anteriores, sin embargo, fue reconfortante volver a ver sonrisas (ocultas detrás del cubrebocas).
La batería alta en esteroides de Turnstile inauguró el slam. La primera presentación del acto de hardcore punk en México estuvo marcada por la facilidad con la que arrastran al público al pie del escenario para redimir su estrés a empujones y saltos cavernícolas. Claros deudores del rap metal de Rage Against the Machine y del grunge de Pearl Jam, los de Baltimore explotan como dinamita. Verlos en vivo es como escuchar sus grabaciones a speed up de 1.5; por eso no es de sorprender que hayan terminado casi 15 minutos antes de lo programado.
Jack Antonoff es un tipo al que generalmente le gusta mantener un bajo perfil. Cuando no le está produciendo a Lorde, Lana del Rey o Clairo, le gusta salir de gira con Bleachers. Loco y extrovertido sobre el escenario, corre de un lado para el otro. Salta cualquier “obstáculo”. Hace cómplices a sus músicos y el público le responde con baile y gritos. Perfeccionista del sonido, se trajo dos baterías al Corona Capital para que le pudieran seguir el paso a su guitarra hiperactiva. Optimista sin remedio. “Rollercoaster” y la gente se deja ir como en un parque de diversiones.
La “Venganza de Moctezuma”. A través de Instagram, Disclosure se disculpó porque un problema estomacal en uno de los hermanos Lawrence les iba a impedir presentarse. Sumado a la cancelación de St. Vincent (días antes por un caso de COVID - 19 positivo en uno de los miembros del crew) y el repentino pero comprensible abandono de The Kooks del cartel (Luke Pritchard voló de regreso a casa porque se convertiría en padre), la mesa quedó puesta para que Tame Impala cerrara el primer día de actividades sin rush previo.
Cayó la noche y una ligera llovizna nos trajo la psicodelia líquida de Khruangbin. Ya sea por la ascendencia mexicana de la vocalista Laura Lee o por los paisajes desérticos que evocan sus canciones, el trío texano siempre es bien recibido en nuestro país. Tras el cover instrumental de “Bam Bam” (Sister Nancy, 1982), una densa nube de humo con THC se levantó y disipó la amenaza de lluvia. “Time (You and I)”; en un abrir y cerrar de ojos, luego de 20 meses en casa, algunas parejas salieron para poder disfrutar de la música en vivo al aire libre y con la luna de testigo de su amor.
Mientras en una inmensa carpa, Slowthai no terminó de conectar con el público, el escenario Bosque le quedó pequeño a Dayglow que se armó su propio festival dentro del Corona Capital 2021. Esperábamos que la irreverencia del inglés desatara una locura; sin embargo, el ánimo de los asistentes no estaba como para perder la cabeza. Francamente, Tyron tampoco está pasando por un buen momento, sabemos de los problemas que viene arrastrando desde hace un buen tiempo. Ojalá haya oportunidad de verlo en el futuro, en circunstancias más favorables.
La otra cara de la moneda es Sloan Christian. Este chico a sus escasos 22 años es la personificación de la alegría y el optimismo. Definitivamente una de las grandes sorpresas para esta edición. Con 274 millones de reproducciones en Spotify, “Can I Call You Tonight?” rápidamente se convirtió en una de las canciones favoritas que las relaciones de pareja a distancia se dedican. Al interpretarla, todo mundo se olvidó del caos y se entregó a repasar los versos.
La franja horaria de los headliners quedó prácticamente vacía. Sin St. Vincent, Disclosure y The Kooks (que, por cierto, días antes se presentó en el Teatro Metropólitan), se tuvieron que realizar un par de ajustes de última hora. El show de LP se recorrió una hora para realizarse de 20:50 a 21:55 H y Cuco fue anunciado con un set sorpresa de media hora. El chicano que, dicho sea de paso debutó en México como parte de la Semana Indie Rocks! 2019, nos deleitó con versiones acústicas de dos de sus grandes éxitos: "Lo Que Siento" y "Lover Is a Day".
En compensación por las dificultades, los organizadores anunciaron que las personas que compraron su boleto solo para el sábado podrían ingresar gratis al día siguiente para el complemento del festival.
A escasos días de coronarse con un Foro Sol y teniendo ni más ni menos que a MGMT y Clairo de teloneros, Tame Impala tuvo que suspender -y posteriormente cancelar- su presentación en la Ciudad de México. Marzo del 2020, el mundo se declara en alerta por pandemia. La historia es por todos conocida. Con mucha incertidumbre el último gran evento musical masivo que se realizó fue la edición 21 del Vive Latino.
20 meses después, Kevin Parker se puso a mano con uno de sus fandoms más fieles. Es un cliché, pero todas las bandas dicen que están ante su público favorito. Puede que en muchos casos sea una arenga para exacerbar el ánimo de las audiencias; en el caso de Tame Impala tiene un alto grado de veracidad. Escogió nuestro país para cerrar su año: Pa’l Norte, Guadalajara y CDMX, respectivamente. Su próxima fecha confirmada hasta el momento es el Primavera Sound de Barcelona en junio del 2022.
Con toda puntualidad, a las 22:20 H, la banda saltó al escenario para entregarnos 100 minutos de sinestesia, rayos láser y una ola de éxitos. “One Year”, en realidad casi dos son los que tuvimos que esperar para escuchar este tema en vivo de su nuevo disco: The Slow Rush. “Borderline” para comenzar a abrir las puertas de la percepción. Su versión de seis toneladas de “Elephant” llevó el show al siguiente nivel. El aro de luz y los visuales nos hicieron alucinar.
Combinando novedades, clásicos radiofónicos y tesoros guardados, ejecutaron “Lost In Yesterday”, “Beverly Laurel“ (b-side que rara vez tocan en vivo), “Feels Like We Only Go Backwards”, “Endors Toi”, “The Less I Know, The Better” y “Eventually” solo por mencionar algunos tracks. Con “Let It Happen” la catarsis estuvo completa. El confeti y los rayos láser que cayeron sobre nuestros hombros durante “New Person, Same Old Mistakes” son la promesa de que las cosas irán mejor de aquí pal’ real. ¡Mil gracias, Kevin Parker!