216131
A 10 años del debut homónimo de Jake Bugg 

A 10 años del debut homónimo de Jake Bugg 

Entre chispazos de energía folk rock se cuela un corazón roto que no pretende pasar el resto de sus días en soledad.

Hay gente que piensa que mirar televisión no deja nada bueno. Honestamente, y -pensando en los programas de hoy en día-, podría ser una realidad tal premisa, sin embargo, hace 10 años la sencilla acción de mirar TV le cambió la vida a un chico de Clifton, Nottingham. Mientras disfrutaba de un día cualquiera mirando el televisor, Jake Bugg descubrió una canción que le voló la cabeza. Entre destellos mágicos y llenos de melancolía, “Vincent (Starry, Starry Night)” de Don McLean, lo invitó a enamorarse de la música y hacer de ella parte de su vida.

Para ese entonces Jake contaba con tan solo 12 años. La inquietud de crear pronto se convirtió en una realidad. Tiempo más tarde su tío le obsequió una guitarra que aprendió a tocar de manera autodidacta para luego crear de manera independiente sus primeras canciones. Con una base sólida de aprendizaje, el músico se embarcó en la compleja tarea de tocar puertas y desbloquear oportunidades. 

Habían pasado cerca de dos años desde este conmovedor inicio cuando Bugg ofreció un “primer concierto” en su colegio, para después establecerse en los diferentes bares y clubes de Nottingham. Se postuló para el Festival GlastonbudgetSpoiler alert: fue rechazado; pero eso no impidió que él continuara su búsqueda de oportunidades; porque claro, la vida nos ha enseñado que siempre hay algo esperando por y para nosotros. Y por supuesto que así fue. Jake pronto recibió esos primeros rayos de luz gracias a un llamado por parte de la BBC Radio 1 que pronto lo llevó a entablar conexión con Mercury Records para finalizar un encantador y novedoso homónimo del que hablaremos ahora.

jake bugg-2012

“There's a story for every corner of this place”

Influenciado por artistas como Bob Dylan, The Beatles, Oasis, Johnny Clash, por mencionar algunos. Jake Bugg empezó a forjar un estilo sumamente ligado al rock folk, country con toques de blues. Su propuesta era un guiño a los años 60, algo no necesariamente nuevo pero que sí prometía destacar entre lo que resonaba en aquél momento. 

Hoy el cantante comenta “No puedo creer que hayan pasado 10 años desde el primer álbum”, y es que todo ha pasado demasiado deprisa. El álbum impactó de diferentes maneras a los escuchas. Las melodías con sabor agridulce repletas de matices grisáceos llegaron cuando muchos de nosotros apenas estábamos en la adolescencia así que comprender estas líricas honestas que fijaban su atención en pro de la libertad y en el desahogo del mal de amores, nos llenaba de empatía, nos envolvía el corazón, nos hacía querer gritar de emoción y luchar por lo que apenas teníamos. 

***

“Lightning Bolt” da inicio al debut homónimo bajo la constancia de una guitarra acústica que nos emociona por su velocidad y esa simpatía que muestra para con el escucha. El coro se ve revitalizado entre un enérgico juego con la guitarra eléctrica; una canción que habla un poco de los días grises y de la fortuna. Por su parte, y manteniendo un ritmo similar, “Two Fingers” nos permite verle el lado divertido a la idea de escapar o permanecer en algún lugar.

La guitarra vibrante de nuestro intérprete consigue darnos vida y al mismo tiempo, nos la arrebata. Es en “Taste It” donde entre animados riffs se entabla un diálogo para profundizar en el adiós, el futuro y la sensación de estar vivo. Mientras que en “Seen It All” nos muestra todo lo contrario en una onda más depresiva. 

Is love just suffering?

Podríamos decir que el homónimo de Jake Bugg se divide en dos partes que a su vez, consiguen tener el mismo hilo conductor. La idea de exponerse vulnerable ante su propia visión del mundo y a un suceso de desamor, nos muestra una faceta de un personaje derrotado que tranquilamente podemos comprender porque todos hemos pasado por lo mismo; escuchen “Simple As This” y entenderán. 

El ritmo de la guitarra cambia. Las canciones se apegan a la lentitud para expresar con cautela la idea de llamar a alguien cuando estás roto por dentro. La interpretación es tan calma que la voz de Bugg nos genera un nudo en la garganta en temas como “Country Song”, “Broken”, “Ballad Of Mr Jones”, “Slide”,“Someone Told Me” dejándonos llevar por una ola de dolor. ¿El destino es cruel? ¿Hacia dónde se dirige? 

Jake bugg_2012

En la recta final nos regala una dosis de ritmos rápidos para manifestar los problemas y las noches oscuras en soledad en melodías sutiles como “Trouble Town”, “Note To Self”, “Someplace”“Fire”; culminando un extenso material que nos deja con un gran sabor de boca. 

El álbum debut homónimo de Jake Bugg consiguió revolucionar el panorama del 2012. A la edad de 18 años el británico ya tenía mucho que decirle al mundo. Y pronto consiguió ser telonero de actos como Noel Gallagher's High Flying Birds y Stone Roses. Este material le permitió desenvolverse con mayor facilidad en el mundo de la música. Hoy, después de 10 años de su lanzamiento, escuchar el LP consigue arrancarnos sonrisas y destellos de felicidad al saber que fue un debut abrasador; el gran comienzo de un gran artista. 

Para celebrar la primera década, el músico presenta una versión remasterizada del mismo en Abbey Road Studios con un añadido de 18 canciones, gran parte de ellas presentadas por primera vez como “It’s True”, “Mr. Minister”, o “Love Me The Way You Do”. Además, incluye la presentación completa de su concierto en el Royal Albert Hall de 2014.