Frenesí lleno de funky y mucho baile con Los amigos invisibles en House Of Vans.
Sin duda una de las urbes más activas entorno a la música es la Ciudad de México y es precisamente dentro de la capital chilanga que House Of Vans se ha convertido en uno de los recintos con mayor movimiento —prácticamente cada fin de semana— y en esta ocasión los invitados de lujo pusieron a vibrar al santuario skate, se trató de la visita de Los amigos invisibles.
El reloj marcaba las 21:15 H, momento para el cual los ánimos estaban en el punto cenit y la buena vibra era imposible de ignorar, pues vale mencionar que el lugar estaba totalmente abarrotado. Como si se tratará de un acto onírico, las luces paulatinamente cobraron vida sobre el escenario y durante unos segundos el foco de atención fue una enorme pantalla LED; frente a ella permanecían en sosiego una batería, un bajo, una cortinilla de metal, un par de guitarras y una pulida conga con sus respectivos bongos. Acto seguido, aparece el combo venezolano y con una energía paralizante arrancan lo que sería una velada llena de bailes alocados.
Bailes casquivanos encendieron la noche
El banderazo de salida lo dieron temas como “Antes de dormir” y “Malpensada”, para que después la banda hiciera un recorrido por las 17 canciones pertenecientes al nuevo disco Cool Love, al tiempo en que alternaron su reciente trabajo con rolitas de toda su discografía, pasando por al menos un par de temas pertenecientes a sus 10 álbumes.
“Gracias a ustedes por estar aquí, esta noche se viene buena así que bailemos”, se escuchó al vocalista Julio Briceño antes de continuar con la velada bañada en sonidos que sí o sí ponen a mover el esqueleto, al grado que incluso miembros del staff en HoV se podían apreciar en sus respectivos lugares de trabajo balanceándose al ritmo tan distintivo de Los Amigos Invisibles.
Ondas sonoras matizadas de acid jazz, funk y ritmos latinos fueron ejecutados con destreza y una total entrega por parte de José Luis Pardo en la guitarra, Juan Manuel Roura en la batería y los músicos que protagonizaron una agitada noche, al tiempo que Julio sacaba los pasos prohibidos a la par que alternaba para tocar el güiro.
Un sample fugaz de “Barbie Girl” de Aqua seguida de algunos segundos de la melodía de “Billy Jean” de Michael Jackson se escucharon antes de que el tema “Cuchi-cuchi” pusiera a todos en frenesí al escuchar al frontman lanzar una contundente pregunta: ¿Esta noche harán el cuchi-cuchi?”, con la cual hizo reír a las danzantes almas.
Temas como “Qué rico”, “En Cuatro”, “Yo no soy”, “Óyeme nena”, “La vecina” y "Espérame" fueron coreados por cientos de gargantas chilangas, sin embargo, el momento cumbre llegó cuando (luego de irse por unos minutos y regresar a dar el plus) entonaron “Mentiras” y “La Que Me Gusta”, tema que como cereza del pastel llegó para cerrar la noche, una en la que se dejó en claro que a pesar de que la agrupación lleva más de 25 años tocando algunos de los mismos temas, su energía desbordada genera una sensación de asombro como si se tratara de la primera vez.