Foro: Teatro Ángela Peralta

Rhye en el Teatro Ángela Peralta

Rhye, una noche de intimidad elástica e impredecible.

Lejos de aquello que puede expresarse en palabras, habita la música con su semblante impredecible, hechizando a todo aquel que logre desprenderse de las formas cotidianas.

La noche de ayer no cabía un alma en el Teatro Ángela Peralta y bajo un techo de estrellas Rhye nos abrió las puertas de un espacio encantado en donde pareció inevitable que nuestra atención se quedara prendada del sonido.

Para su tercera visita, el dueto conformado por Michael Milosh y Robin Hannibal sumó a sus filas el talento de cinco músicos que, en complicidad y control absoluto de sus instrumentos,  lograron construir una experiencia llena de sobresaltos emocionales, que hizo que tanto el cuerpo como la mente, se entregaran al impredecible baile de la imaginación.

El set incluyó en su mayoría temas de Woman –álbum lanzado en 2013 que les valió el reconocimiento de la prensa especializada gracias a su sonido de  matices electrónicos y R&B–, sin embargo también fue posible escuchar algunos temas nuevos (“Him” y “Waste”) en donde se hizo notoria una madurez musical que aún cimentada en el R&B, empieza a coquetear muy de cerca con la flexibilidad multiforme del jazz.

Tema tras otro, la voz elástica de Milosh entregó melodías que gradualmente florecían hasta convertirse en explosiones luminosas, cuya sensibilidad nos mantuvo en un estado constante de compromiso con el sonido (tanto así que por primera vez en mucho tiempo los teléfonos pudieron quedarse en los bolsillos y la mayoría de los ahí presentes pudo ver a través de sus propios ojos).

“Major Minor Love” y su tejido vocal de gran belleza, nos ofreció uno de los mejores momentos de la noche haciendo evidente el gran nivel de comunicación y amarre entre los músicos quienes a pesar de las frecuentes complicaciones con el  sonido lograron fluir en el escenario.  

“3 Days” por su parte, se alejó de su carácter bailable para transformarse en un universo lento y nebuloso donde las cuerdas crearon un ambiente de sensualidad y profunda intimidad.  En “Shed Some Blood” y “Last Dance” –por nombrar solo un par de temas- la multiinstrumentista Claire Courchene (cello/trombrón) nos regaló momentos memorables, demostrando no solo maestría en el desempeño de ambos instrumentos, sino un grado de sensibilidad y musicalidad genuinos.

Con euforia "Hunger” nos hizo abandonar los asientos en el único momento bailable de la noche, volviendo pronto a la melancolía con “It's Over”, –el último tema del set– en donde la voz desnuda de Milosh se apartó del micrófono para sumergirnos en una escucha de aliento contenido que al finalizar la noche, nos mandó a casa entre suspiros , abrazados por el frío del invierno que decidió acompañarnos en una noche que para muchos, estuvo a punto de ser casi perfecta.

NOTA: Fuera de lo concerniente a la música –motor predominante de esta reseña– es importante hacer un paréntesis para mencionar la deficiente organización del evento, en donde muchos de los asistentes tuvieron problema con el acceso encontrando que las zonas en donde se encontraban los boletos que habían comprado ya estaban abarrotadas para cuando llegaron, por lo que tuvieron que ser ubicados en zonas de menor precio, o ver el concierto de pie.

En los últimos años el precio de los boletos para asistir a conciertos se ha encarecido de manera considerable (en este caso el acceso iba de los 400 a los 900 pesos), haciendo que el espectador tenga que hacer un esfuerzo importante en su economía  para permitirse ver a sus músicos favoritos. Es deber del empresario corresponder a este esfuerzo con un trato que garantice una experiencia de calidad para quien paga por un espectáculo. Lamentablemente este no fue el caso.

Rhye en el Teatro Ángela Peralta

No te pierdas del regreso de Rhye a la Ciudad de México.

El proyecto musical conformado Mike Milosh y Robin Hannibal, Rhye, regresará a la Ciudad de México en su formato full band para ofrecer un concierto en el Teatro Ángela Peralta, ubicado la calle Aristóteles s/n en Polanco.

La fecha, presentada por DORADO, es el próximo 28 de enero. Las puertas estarán abiertas desde las 16:00 H pues habrá alimentos y bebidas para los asistentes, además se presentarán algunas bandas invitadas para calentar los ánimos previo a la presentación de Rhye. Pronto tendremos más información.

Los boletos ya están disponibles a través del sistema Boletia, y están segmentados de la siguiente manera:

Dorado VIP - $950
Oro Central - $750
Oro Laterales - $750
Plata Central - $600
Plata Laterales - $600
Bronce Central - $400
Bronce Laterales - $400

Rhye lanzó su álbum debut Woman en marzo de 2013 a través del sello Polydor Records, del cual se extrajeron algunos temas como “The Fall” y “Open”. Escúchalo de nuevo aquí abajo.

Rhye is the duo of Mike Milosh and Robin Hannibal. Their debut album is called Woman.

 

RBMA Radio Panamérika Celebration

RBMA Radio Panamérika: música, atardecer y gente pasándola bien.

Calor, mucha gente, mucho Red Bull. Faltaba poco para las 13:00 horas, y la fila afuera del Teatro Ángela Peralta todavía era larga. Adentro, todos esperaban —cubriéndose del sol con lo primero que encontraran— a que Centavrvs abriera el escenario con su peculiar sonido.

Con Paulina (Sotomayor) en percusiones, la banda nominada al Latin Grammy dio inicio con el pie derecho, y se hizo acreedora de gritos y aplausos. “Chiquita milagrosa” sonó, trayéndome recuerdos de un Vive Latino que solo pude ver por internet. “Por eso”, un estreno llamado “El punto final”, y una versión muy a la Juan Cirerol de “Sombras de oro” se llevaron con ovaciones la primera hora de una gran fiesta.

Invitando a varios colegas al escenario, Torreblanca colmó el lugar de voces que presumían conocer cada palabra de la melodía correspondiente. Un setlist complacedor logró que pocos se quedaran sentados. Algunas canciones fueron “Dejé de ser yo, con Funky Maya bailando al ritmo; una nueva al lado de Mariel Mariel, que lleva por título “¿Qué esperas?”; “1000 fantasmas”; las ya esperadas “Roma” y “Sí” —esta última adornada con la voz de Flor Amargo—; y “Hubo valor”, para terminar con una presentación que siempre deja un buen sabor de boca.

Después de unos minutos y un par más de latas de Red Bull, regresé a buscar un lugar, lo cual fue imposible; todo se encontraba lleno para ver a Astro, banda que inyectó al recinto de alegría en forma de melodías eléctricas antes de dar paso a Compass, que prendió desde antes de salir al escenario. “Sunshine”, “La llama” y “Yo digo baila” lograron que la única separación entre los invitados, los de prensa, y el público fueran las vallas y la gente de seguridad.

Y entonces dieron las seis de la tarde, estábamos más que listos para Bomba Estéreo. La celebración por los siete años de Panamérika estaba llegando a su fin. En el lugar no cabía una persona más, y de tanta bebida que recargaba nuestra pila, los saltos no paraban. “Solo tú”, “Soy yo” y “Somos dos” sonaron de corrido sin permitir pausas, y como dijo Liliana: “No hay nada más bonito que música, un atardecer, y gente pasándola bien”.

Nouvelle Vague viene a México

La banda francesa Nouvelle Vague visitará la Ciudad de México para ofrecer un concierto el próximo 11 de septiembre en el Teatro Ángela Peralta y el 12 en el Teatro Estudio Cavaret, donde presentarán su cuarto disco titulado Couleurs sur Paris.

Los boletos ya se encuentran a la venta a través del sistema Ticketmaster y en taquilla.

 

ArsFutura: encuentro de música innovadora y futurista

Música sin fronteras, música fuera de este mundo. Con una ligera lluvia, que afortunadamente no duró más que unos minutos, dio inicio el Festival ArsFutura en el Teatro Ángela Peralta. La expectativa de días previos estaba a punto de convertirse en realidad, y fue superada con creces.

El primero en subir al escenario fue Jeffrey Zeigler, quien a pesar de tener problemas con el audio en su primera pieza, combinó el uso del  arco y la técnica del pizzicato, dejando atrás la postura con “Babel”. Samples de aves, ambulancias y perros, que tapaban por momentos el sonido del chelo llenaron de imágenes mentales al público con la interpretación de su disco debut como solista “Something of Life”.

“Listen, Quiet” con destellos suaves de campanas, cubría todo de calma, Zeigler cerraba los ojos, meditaba. La lluvia paró. Antes de que un viento fuerte lanzara decenas de hojas de un árbol cercano frente al escenario (algo poético de alguna forma), tocó “Glaub”, pieza final, acompañado de Felipe Pérez Santiago en la guitarra. Con riffs potentes, samples  de radar y los golpes a las cuerdas del chelo erizaban el cuerpo, produciendo un escalofrío que aumentaba su intensidad al ser representada en la pantalla central con líneas que avanzaban al ritmo de los sonidos. Un comienzo espectacular.

John Medeski y Todd Clouser llegaron después de un breve receso para presentar un experimento sonoro: la suite "Boy 44", creada especialmente para el festival. Se aventuraron a la experimentación con pianos alienados y una guitarra llena de matices consiguiendo una atmósfera propia. “What they gonna do with all that money?”, cantaba Clouser con un tono de balada tortuosa, apostando por las letras que evocaban la condición humana y la corrupción que aqueja el mundo.

A lo largo de su presentación contaron con tres invitados que salieron de entre el público: Diego Franco en el saxo, Alán Fajardo en trompeta y la potente e inigualable voz de Renee Mooi, que contrastaba de manera formidable con los elementos de rock y jazz que aportaron los estadounidenses. Para finalizar este acto, los cinco músicos subieron al escenario, y mientras el ensamble llenaba de fusión el aire, Todd contaba del 1 al 44; un claro homenaje a los 43 desaparecidos de Ayotzinapa, un final que le daba congruencia al nombre de su obra.

Solo quienes dejan atrás los sonidos domesticados y tienen libertad total pueden hacer que los sentidos vibren, y suscitar la emoción entre cientos de asistentes. Murcof y Erik Truffaz junto con el baterista Hernan Hecht y el guitarrista Edgar Amor, presentaron Being Human Being. Con tres pantallas encendidas, en las que se mostraba la novela gráfica de Enki Bilal que inspiró el álbum, y un diseño de luces impactante, el augurio para el tercer acto era más que prometedor. Y así fue.

Platillos sutiles y filtraciones de sonidos espectrales crecían poco a poco como una molécula que se convirtió en amiba con los timbres de trompeta que obedecían el pensamiento de Truffaz. La sutileza electrónica que acompañaba los tonos aguamarina de la pantalla se rompió con la entrada de unos enérgicos y gruesos beats para dar pie a “Warhole”, llenándonos de imágenes violentas acompañadas de un juego de luces rojas, que por momentos recordaban el caos y el desequilibrio de la sociedad.

Golpes secos y contundentes en la batería y una guitarra que experimentaba con el uso de un arco, producían ritmos mutantes llenos de intriga y emociones llenas de sonidos inéditos. La noche culminó con melodías de ambición cósmica y luminosidad, y demostró que la música rebasa las fronteras físicas y, cuando existe la voluntad, se posiciona en la mente de quien la escucha para el resto de su vida.

ArsFutura salió de la nada y se colocó como uno de los festivales de propuesta más interesantes. La primera edición dejó un gran sabor de boca entre los asistentes (y los que se lo perdieron). Habrá que esperar a 2016, y ver cómo una propuesta de corte independiente y vanguardista prosigue su camino hacia la consolidación.

ArsFutura, Festival de música sin fronteras

La electrónica, el rock experimental y la música contemporánea se reunirán en un mismo sitio en la nueva edición del ArsFutura, que en esta ocasión presenta un cartel conformado por grandes personalidades como Murcof, Erik Truffaz, John Medeski, Todd Clouser y Jeffrey Zeigler.

El festival ofrecerá un excelente escaparate donde la electrónica de Murcof se mezclará con las improvisaciones del trompetista Erik Truffaz, el pianista John Medeski y el líder de A love Electric Todd Clouser, con la música contemporánea de Jeffrey Zeigler.

La cita para disfrutar del talento de estos grandes de la música será el 11 de abril en el Teatro Ángela Peralta y los boletos se encuentran a la venta en Ticketmaster y en oficias de Indie Rocks! (Fernando Montes de Oca 14 Colonia Condesa. Lunes a jueves de 10:00 a 17:30 hrs. Viernes de 10:00 a 14:30 hrs.) con un precio de $450.00.

Más detalles del evento aquí.

Sólo por hoy, obtén 2x1 en los boletos de venta en Ticketmaster.

Entre aviones y carros camoteros: Yann Tiersen

¿Por qué a Yann Tiersen no le llaman maestro como a Gustavo Santaolalla o Andrés Calamaro? Bueno, tal vez sea cosa de argentinos, pero la verdad es que el estatus original de Tiersen, asociado más a círculos culturales que a conciertos masivos, cada vez se difumina más. ¿Por qué? Cada recital suyo en nuestro país convoca más y más personas. ¡Anoche fue un mar de cabezas!

De alguna manera, la gente que se encarga de traer al músico y compositor a nuestro país se aferra a no soltar aquel estatus cultural, como si se tratara de una figura de conciertos magistrales y festivales de música barroca en lugar de alguien que ha pisado festivales como Rock Werchter, Coachella y FunFunFun Fest.

Ciertamente, la noche de ayer tuvo un ambiente bohemio gracias al escenario, común de festivales de blues y jazz en nuestra ciudad, aunque cabe señalar que la vibra se apegaba mucho más al rock.

En el cierre de su gira por Norteamérica, con la que previamente nos visitó para ofrecer dos conciertos de función doble a reventar, Tiersen no presentó grandes cambios en su set; mejor dicho, ningún cambio, pues todo estaba ensayado y programado. Pero, ¿qué mas da? ¡Es Yann Tiersen!

Nuevos temas y clásicos fueron entremezclados de manera increíble, incluso llegó un momento en el que la ambientación de luces y las grabaciones atmosféricas eran capaces de transportarte a otras tierras, tal vez a la tierra natal de Tiersen, Bretaña. Pero antes de que el viaje estuviera completo se escuchó a lo lejos un carrito camotero, un claxon y hasta un avión; ¿cómo le dices "shhh" a un avión? Con razón no usan tanto el Angela Peralta.

Si bien existen otros factores que pueden afectar el deleite de un show en un espacio abierto, como es el caso de sentarte junto a un fumador, el poder de la música de Tiersen y compañía fue apabullante. El combo de “The Gutter”, seguida de “The Crossing”, “Vanishing Point” y “Lights”, éstas últimas tres con Yann detrás de un sintetizador moog, fueron lo mejor de la noche.

Tras el ritual de esconderse tras el fin del set y regresar para un encore de tres canciones, que incluyeron “The Long Road” con Tiersen solo al piano y “Sur Le Fil” con solo un violín, el francés se retiró pero dejó las luces apagadas ¿Un último encore? El concierto empezó temprano, a las siete y media para ser precisos, así que el frío no era la gran cosa, entonces ¿por qué no aplaudir más fuerte?

Unos gritaron para que volviera a salir, pero al parecer no pasamos la prueba del aplausómetro porque las luces se encendieron después de un rato y la música de fondo nos invitó a salir. Pero, ¡hey!, salimos más que contentos.