Fotos Ernesto Alquicira Madrazo
Mucho y muy buen ruido para un sábado en la tarde en Casa del Lago.
Ubicada a un costado del legendario Lago de Chapultepec, en las apacibles inmediaciones de La Casa del Lago se llevó a cabo la primera edición de Metal en el Lago, donde el rock, el noise y el metal avant-garde se dieron cinta en un evento gratuito organizado por el Bestia Festival en colaboración con la UNAM.
Esta primera edición tuvo lugar en el Foro Arreola –espacio acondicionado a modo de escenario al aire libre, situado justo enfrente de la emblemática construcción–, llevando como cabezas de cartel a los oriundos de Filadelfia, Estados Unidos Cleric, y a los jaliscienses de Descartes a Kant.
En punto de las 16:00 H. (y tras algunas indicaciones de seguridad proporcionadas por parte de las autoridades universitarias) daría inicio el show cómico-mágico-musical (como ellos mismos lo definen) de Descartes a Kant.
Desde el primer momento en que pisaron el stage, las reacciones de júbilo no se hicieron esperar, y la agrupación se entregó total y furiosamente a sus fans, ofreciendo sus deliciosas estridencias a través de temas como “Dolce”, “Suckerphilia”, “Mommy”, “Suppertime Rules” y desde luego el que podría decirse que es uno de los himnos de la banda: “You Assfucked My Heart”.
La vocalista y guitarrista Sandrushka Petrova estuvo particularmente intensa, y sus palabras, movimientos teatrales e interacción con el publico fueron bien recibidas, en especial cuando se dirigía a ellos para agradecerles su presencia, o cuando tomando agua de una botella decidió “bañar” con su boca a los fanáticos que estaban al pie del escenario. Tras un set de casi una hora, la agrupación tuvo que despedirse, no sin antes anunciar que este sería su último concierto en México antes de iniciar una gira que los llevará por España, Islandia y Nueva York.
Siguió una breve pausa en la que se reacomodaban instrumentos y equipo en el escenario, y se dio paso a la actuación de Cleric, que visitó por segunda ocasión nuestro país, desde aquel concierto que se llevó a cabo en 2016 en el Lunario, al lado de Godflesh y Simulacrum.
Y así, la calma de una apacible tarde de sábado en Chapultepec sería quebrantada por los rabiosos alaridos de Nick Shellenberger, los inclementes golpes a la batería del ya mencionado Kwartowitz y las decibélicas notas emanadas tanto del bajo de Chris Weindel, como de la guitarra de Hollenberg y del teclado de Shellenberger.
Durante su actuación que fue continua (apenas interrumpida por un par de diálogos de Nick dirigidos a la concurrencia, uno de ellos en español), Cleric ejecutó una selección de temas extraídos de sus discos Regressions y Retrocausal principalmente. Temas como “The Boon”, “Allotriophagy”, “Resumption” y “Cumberbund” figurarían en esta selección.
Y así de rápido como inicio, su actuación llegó a su fin. Eran alrededor de las18:00 H., y aunque todavía había luz del día, la satisfactoria sensación que dejaron en el público asistente al recital, parecía más bien de un sabor a una intensa noche de sábado. Con un público que quedó cansado y satisfecho, esperando por una segunda (e igual de sorprendente) edición.