El Auditorio Blackberry sirvió como la sede de A/Visions 2 en el cartel de la 14a edición de MUTEK.
Los artistas Steve Hauschildt, Alva Noto y Lorenzo Senni presentaron sus proyectos audiovisuales contemplativos en el respectivo orden dentro de A/Visions 2, dándole usos diferentes al auditorio. Hauschildt, de origen estadounidense, utilizó la pantalla del auditorio para graficar su set sónico con colores en gradiente, acompañados de geometría y líneas que interactuaban entre sí con el color de acompañante. Al ser el primer acto, el público recién se adaptaba al dominio digital del espacio y, aunque por la parte musical, Hauschildt no trabaja con la rama del dance en su perspectiva electrónica, su presentación estableció un ritmo neutral.
El siguiente acto fue quizás el más esperado por la audiencia, ya que, al terminar Steve, gran parte del público que estaba sentado esperándolo se levantó casi prediciendo la violencia que vendría con Alva Noto. Antes de iniciar, se evidenció –tanto en la pantalla, como en el rostro del alemán– una falla técnica, solucionada pasados 10 minutos del horario agendado. Noto ocupó la zona trasera al escenario para establecer iluminación acompañante a su audiovisual que terminarían por ser estrobos tan ágiles como los beats de su set. Los visuales de Noto también relucieron por su simpleza, ya que a diferencia de Hauschildt, no eran espacios etéreos digitales; eran líneas convertidas en ondas a partir de animación en 1D (solo incrementaban gradual y verticalmente). El color y la velocidad fueron los detalles que enfatizaron el poder de su presentación, ya que, con el estrobo de las luces traseras, se convirtió en un espacio de rave durante los 40 minutos que estuvo en el escenario.
Lorenzo Senni fue el encargado de cerrar la noche con una presentación donde optó por los lásers y proyecciones de su sombra en una tela con una S (Senni) impresa para acompañar su set. La distribución de los artistas debió dejar a Noto al final, ya que después de la energía que dejó en el público, Senni no alcanzó a excitar al público como Noto a pesar de la calidad de su set. Esto creó una audiencia confundida y no del todo complacida por la clausura disminuida. De cualquier forma, Senni demostró ser un miembro emergente en su sello Warp, donde su producción innegablemente contiene detalles interesantes que superan la presentación en sí. Fue una noche que pudo distribuirse mejor, pero que de cualquier forma, alimenta el vació contexto digital en nuestra ciudad.