Rock & Cinema: [Capítulo 38] Bob Marley: La leyenda

Entretenido y complaciente biopic.

Robert Nesta Marley fue sin duda la figura decisiva en el proceso de internacionalización de la música reggae y su ideología. La efigie de Bob siempre estará vinculada a dicho género musical y al movimiento rastafari que forma parte integral de ella, y sus composiciones no solamente siguen escuchándose en todas partes, sino que con el tiempo se han vuelto todo un legado, e influyeron grandemente en diversas agrupaciones musicales y en el panorama de la música pop de finales de los 70, a lo largo de los 80 y durante los años venideros.

En marzo de 2021 Paramount Pictures anunció la preparación de una película biográfica sobre el cantautor jamaiquino. Tras dicha producción se encuentran Rita, Cedella y Ziggy Marley (la viuda e hijos de Bob respectivamente), así como el actor Brad Pitt. El realizador designado para el proyecto fue Reinaldo Marcus Green (Rey Richard: Una familia ganadora, Joe Bell, Monsters and Men), y el argumento fue desarrollado por el propio Green, junto con los guionistas Terence Winter, Frank E. Flowers y Zach Baylin. Kingsley Ben-Adir (The OA, Peaky Blinders) fue seleccionado para interpretar al artista. El resultado es Bob Marley: La leyenda (Bob Marley: One Love, 2024).

La historia arranca en Jamaica en 1976, cuando dicho país atravesaba por un momento de gran violencia y tensión política. Marley anunció su intención de llevar a cabo un concierto para promover la paz y pedir a las partes beligerantes poner un alto al fuego. Mientras se encuentran en los preparativos de ese evento; Bob, su esposa Rita (Lashana Lynch) y algunos de los miembros de su banda son víctimas de un atentado a mano armada del cual logran sobrevivir milagrosamente. Tras recuperarse y realizar dicho concierto, entristecido por la situación y porque su vida está en riesgo, el cantante decide que su familia se mude a Estados Unidos. Por su parte, él y la banda se dirigen a Inglaterra para continuar trabajando allí.

Ya instalados en Londres, el músico comienza a buscar inspiración para su siguiente disco, y la encuentra en la fuente menos esperada: en el soundtrack concebido por el compositor Ernest Gold para el filme de 1960, Exodus, dirigido por Otto Preminger. La grandilocuencia de los temas, aunados a ciertos paralelismos que percibe entre la temática de la cinta y su situación en esos instantes, lo influyen para comenzar a componer las canciones de lo que a la postre, será su noveno álbum de estudio intitulado precisamente, Exodus, el cual resultó ser una de sus obras más aclamadas por la crítica y los especialistas, además de ser todo un éxito comercial, y significó un gran impulso para la carrera de Marley, ayudando de paso a popularizar el reggae y difundir la cultura e ideología rastafari alrededor del mundo.

El largometraje también da cuenta de otros momentos significativos en la vida del cantautor: el tour por Europa para promocionar el disco; sus intentos por llevar a cabo una gira por África; sus fricciones con Rita principalmente por sus infidelidades y por los reclamos de ella hacia él por descuidar a su familia; el altercado con su manager Don Taylor por cuestiones financieras; la temprana detección de un cáncer el cual, eventualmente, sería la causa de su muerte em 1981, y su regreso a Jamaica en 1978 donde realiza un multitudinario concierto por la paz y la unidad de su nación.

Desde luego, todas estas viñetas de la vida de Bob Marley son acompañadas por muchas de sus canciones más conocidas, tales como "Get Up, Stand Up", "I Shot the Sheriff", "No More Trouble", "War", "Exodus", "Jamming", "No Woman, No Cry", "Three Little Birds", "Is This Love", y desde luego el tema que le da nombre a la película: "One Love".

Aunque resulta entretenido y atractivo musicalmente hablando, Bob Marley: La leyenda no puede evitar cometer los mismos errores y caer en los lugares comunes de muchas otras biopics. De hecho, objetivamente hablando es en realidad un trabajo un tanto estéril, carente de profundidad. Marcus Green prefiere no tratar de explorar en demasía las motivaciones y sentires de su personaje más allá de lo elemental, y minimiza o de plano esquiva los momentos polémicos en torno a la vida (personal y profesional) del intérprete, los cuales pudieron brindarle matices, realce o dimensión a la historia, y en su lugar decide quedarse en la mera superficie, con un producto seguro, aséptico y a la larga, olvidable. Un mero pretexto para explotar la música de Marley a modo de una versión audiovisual de una rockola o de un playlist de Spotify.

Para concluir, si lo que se desea es aproximarse más a fondo a la figura de la estrella jamaiquina, es mucho más recomendable hacerlo a través del documental Marley (Reino Unido - Estados Unidos), realizado por el cineasta escocés Kevin Macdonald en 2012.