Música regional mexicana encabezada por corridos tumbados en la primera edición de tu nuevo festival favorito.
Agarren su texana y pónganse sus botas vaqueras que la primera edición del ARRE HSBC ya está aquí. Finalmente, y después de varios meses de espera, el festival de música mexicana se celebró en el Autódromo Hermanos Rodríguez. Y aquí tenemos un breve resumen de lo que sucedió en estos dos días.
Sábado
Por: Ana Rodríguez
Puro corrido tumbado y gorritas de gallo
Desde las 14:00 H ya había actividades dentro del recinto. El sol estaba a todo lo que daba, pero las texanas y las gorritas estaban alivianando al público que llegó desde temprano para clavarse en los distintos escenarios a esperar a sus artistas favoritos.
El stage principal imponía entre la maravilla de su estructura. La Hacienda recibió a artistas como Vivir Quintana quien erizó a los presentes con una presentación icónica que involucró desde lo ranchero hasta el mariachi; todo, por supuesto, apoyado por el poder femenino. Bastó escuchar “Canción Sin Miedo” para entenderlo todo. Asimismo, la artista no pudo evitar sonreírle al amor y dedicar algunas rolitas a los enamorados. De esta manera comenzamos un día repleto de emociones fugaces.
Indudablemente parte de la esencia de la música regional mexicana estaba haciendo presencia en el ARRE HSBC. Cuando hablamos del público podemos determinarlo como una mezcla entre generaciones que van desde señores de más de 50, hasta niños de 10 años. La variedad de géneros y estilos fue demasiado puntual dentro del evento y poco a poco se fue descubriendo gracias a artistas como DannyLux y Gabito Ballesteros quienes con sus corriditos tumbados pusieron a bailar y a gozar a más de uno. Su energía se contagió al instante y por supuesto que se lloró, se gritó y el público se emocionó cuando interpretaron canciones como “Me Cambiaste” o “Lady Gaga”, respectivamente.
Definitivamente no se puede pasar por alto el escenario Tecate Original que destacaba por su iluminación neón y por sus proyecciones en las pantallas laterales. Desde Alicia Villareal, pasando por Grupo Marca Registrada hasta Fuerza Regida, en ese lugar se alteraron los sentidos, la gente sacó los prohibidos y se bebieron unos buenos mezcales escuchando de fondo, “Te Aprovechas”, “Di Que Sí” y “Bebe Dame”.
Para el consumo de alimentos y bebidas el ARRE HSBC facilitó a los usuarios el método de pago en efectivo y así pudieron armarse su comida con un poco más de facilidad. Con una little caesars en mano, y en el escenario del mismo nombre, se cantaron despechadamente las canciones de Los Cadetes de Linares; una presentación que se fue como el agua.
Para la medianoche ya se sentía el cansancio y el alcohol correr por las venas de muchos de los asistentes, pero eso no impidió que se lograra ver a Natanael Cano, quien con la magia del Nata Montana prendió fuego en el escenario principal arrancando la velada con “Mi Bello Ángel”. Las trompetas y las guitarras sonaron, hasta sacar chispas y erizar la piel de todos. Se sentía un calor y una emoción recorrer el cuerpo. La adrenalina de ver a un artista que llegó para romperla a lo grande y que gracias a su interés, la escena musical regional mexicana se mantiene de pie y con la frente en alto.
Domingo
Por: Monserrat García
¿Por qué escuchas esto solo cuando estás pedx?
La música regional mexicana es mucho más que solo corridos tumbados y deberías saberlo; banda, sierreño, duranguense, grupera y un montón de subgéneros nacionales pueden apoderarse del mundo entero si se lo proponen, pero para ello es importante empezar por el país de origen.
Así que después de un largo primer día de ARRE finalizado por Natanael Cano, el segundo debía ser aún mejor, ¿no? 26 actos estaban listos para hacernos sentir y vivir un domingo muy ad hoc al mes patrio, aunque para mí eso no importa porque cualquier día, mes y hora del año es bueno para escuchar a Pesado, Kumbia Kings, Mi Banda el Mexicano o La Sonora Dinamita. Afortunadamente la coyuntura actual logra que el estigma hacia quienes disfrutan de este género se desvanezca y es así como llega la oportunidad de hacer eventos en grande y no solo shows sumamente locales de los que no muchas personas logran enterarse, por lo que esta primera edición del festival es clave para el futuro cercano de la música mexicana.
Para nadie es mentira que la mayoría de las personas escuchan esta música en los momentos culminantes de la peda, pero aquí se empezó desde temprano. Acapulco Tropical y su “Cangrejito Playero” combinaron bien con los 25º que pegaban directo en el Autódromo, pero también Hernán Trejo, Nora González y Los Aptos, quienes a pesar de tener una corta carrera supieron cómo ganar el corazón de quienes se acercaron a escucharles e invitaban a que no dejaran de hacerlo.
A eso de las 5:00 pm el flujo de asistentes comenzó a ser mayor. El escenario principal daba indicios de lo que esperaba en las próximas horas: cuerpos apretados, personas aferradas a las primeras filas para no perder ningún detalle, humo, cervezas y calor, pero sobre todo ganas de disfrutar. Herencia de Patrones supo utilizar todo el escenario y toda aquella persona que estaba cerca lo disfrutó, ya saben, whole lotta clika shit.
Del otro lado del Autódromo la fiesta estaba buena y el motivo era El Coyote y su Banda Tierra Santa, con canciones como “Arboles de la Barranca” y “Para Impresionarte” puso a bailar a todxs, pero Mi Banda el Mexicano no se quedó atrás y a pesar de estar en el escenario más pequeño, dio todo con “Ramito de Violetas” y “Feliz Feliz”.
Cuando la luz del sol se despidió con la llegada de la luz de la luna, las canciones de Yahritza y su Esencia dejaron claro que quienes las escuchan las cantan con emoción, y que pese a que algunas personas de las primeras filas mostraban descontento por lo que ya todxs sabemos, el resto de lxs asistentes no tuvo problema en corear “Frágil”.
Si Peso Pluma no existiera, Ramón Ayala podría ser headliner. Desde el principio y hasta el final de su set no dejó espacio para malos ratos. ¿Cómo iba a ser eso posible si la primera canción fue “Tragos de Amargo Licor”? En fin, los que también iniciaron con esa canción que todxs esperan escuchar, pero a veces llega hasta el final fue Pesado; qué fantasía ser músico y que abras tu show con “A chillar a otra parte”, uff.
En la recta final de la noche, otra agrupación que muy probablemente merecía un escenario más grande fue Edwin Luna y la Trakalosa de Monterrey. Ahí no cabía una sola persona más. Pero ahora sí, el momento que quizá la mayoría de personas en ARRE estaba esperando estaba cerca; Peso Pluma tenía la atención de todxs y el show ni siquiera había empezado, así pasaron los minutos hasta que “Psycho Killer” de Talking Heads comenzó a sonar y los músicos que acompañan a PP aparecieron uno a uno en las pantallas para expresar qué significa Peso Pluma para ellos.
Jasiel Nuñez fue el invitado especial que rápidamente apareció, así que “ROSA PASTEL” ya había sonado antes de que el set llegara a la mitad y obviamente todxs estaban felices. Conforme la noche avanzó sonaron los que ahora son clásicos, “El Azul”, “TULUM” y “LADY GAGA”, todo esto mientras Peso Pluma compartía constantemente que estaba emocionado y orgulloso de estar en el festival.
Así terminó la primera edición de ARRE, un festival que seguramente llegó para quedarse muchos años más. ARRE es amigxs, baile, pisto y mucha música. ¡Prepárate para el 2024!