"Hay que perder para ganar" y cómo las lecciones del Sab-hop reventaron el Palacio de los Deportes.
La noche del 28 de septiembre sería una en la que volveríamos a las inmediaciones del Palacio de los Deportes, recinto que daba una vibra diferente a la normal por tener sillas en su pista, lugar que se caracteriza por tener a la gente vuelta loca y de pie. De fondo, y junto al escenario, se distinguían dos contadores que al momento en el que entramos ya marcaba 250 segundos, mientras continuaba su marcha hacia el cero.
La gente comenzaba a tomar su lugar a medida que los contadores seguían anunciando el poco tiempo que faltaba para que Sabino subiera al escenario a repartir una buena dosis de Sab-Hop. Faltando 10 segundos para el cero, comenzó a sonar una tonada onírica que tomaba fuerza a cada segundo que pasaba. El momento había llegado, el contador marcaba cero y en las pantallas apareció Sabito, personaje creado por el mismo artista, y que cumpliría el papel de guía a través de un show dividido en tres actos y que dejaría ver lo mejor de la discografía del rapero.
Sabino subió al escenario entre gritos de "Si yo grito Sab, tú gritas Hop", mientras comenzaban los primeros versos de “Sab-hop” y se daba el primer paso hacía una noche llena de vibra optimista y versos precisos. Para este momento, el sonido presentó algunos fallos y dejó a los músicos como principales protagonistas, esto debido a que el micrófono de Sabino no alcanzaba un volumen óptimo y se perdía entre la música y los gritos incontrolables del público. Estos problemas duraron poco, pero fueron constantes durante la noche.
De esta manera recorrimos el primer acto del concierto en el que hubo éxitos de todas las etapas de Sabino y escuchamos canciones como “Préguntale a Mis Ex’s”, “Vaquerer?”, “Toda la Noche”, “El y Ella” y “El Día de Tu Muerte”. Esta etapa estuvo marcada por las constantes intervenciones del artista, que no perdía la oportunidad de agradecer al público por llenar el Palacio de los Deportes y por dejar el alma en cada una de las canciones que interpretaba, “Sin lugar a dudas, la mejor noche de mi vida, debo recordar esto para siempre”, comentó.
Para el segundo acto de la noche, pasamos de un ánimo de celebración infinita, a un momento más introspectivo y en el que se repetía la frase “Hay que perder para ganar”, haciendo referencia a su más reciente material, Perder para ganar (2023). En esta etapa, Sabino tomaba pausas para hablar sobre lo difícil que fue llegar a una noche en la que él pudiera estar frente a tanta gente que disfruta de su propuesta musical. Durante este acto disfrutamos de canciones como “Diamante”, “Como lo Marca el Manual”, “Dale Suave” y “Ninguna Me Pasa”.
Para cerrar este bloque, Sabino recitó “Viernes” antes de interpretar “Entero”, un sencillo que recorre distintas referencias de su vida y sus derrotas a lo largo de esta, pero que mantiene una actitud positiva frente a la idea de que necesitas estar perdido para poder encontrarte. Sin más, Sabino volvió a agradecer comentando: “Cariño, te quiero mucho, y gracias por cumplir el sueño de un Pablito que se miraba en el espejo, mientras soñaba con este momento”.
De esta manera, llegamos al tercer acto de la noche, el cual destacó por presentar distintos invitados que han formado parte importante de la carrera del rapero tapatío, junto con la interpretación de sus éxitos más pesados. La recta final comenzó con la interpretación de “Guapa!” y pasamos por éxitos como “Conmigo siempre” que fue una de las más coreadas de la noche. Para la primera de tres colaboraciones, Sabino invitó a Fer Casillas al escenario para la interpretación de “Nuevequince”, sencillo que elevó la emoción de la audiencia, mientras nos preparaban para un cierre magistral con la interpretación de “Me puse pedo”, momento que ,sin duda, quedará marcado en la memoria de todos los amantes del Sab-hop.
Entre aplausos y vitoreos, Sabino dejaba el escenario por primera vez, dejando a la audiencia en espera del encore que daría cierre definitivo a una noche llena de energía y muy buen ambiente. De esta manera, el rapero regresó al escenario portando una playera de Vegeta, junto al rapero Lng/SHT quien sería la segunda colaboración, mientras portaba una playera de Gokú, y juntos interpretaron “Los Raros de la Clase” un clásico de ambos artistas y que explica de gran manera su propuesta y metas dentro de la industria nacional.
Así, Sabino dejaba el escenario para un último cambio de vestuario y regresó para dedicar las últimas tres canciones de la noche a una audiencia que nunca dejó de apoyar, mientras demostraba un gran cariño hacia el rapero. De esta manera, la misma audiencia se convertía en la tercera y última colaboración de la noche. La primera de estas canciones fue “Date Cuenta”, sencillo en el que Sabino se tomaría un momento para decir “Para mí, esto es suficiente, tú (audiencia) haces que todo valga la pena, tú me haces despertarme feliz y estoy eternamente agradecido por eso”.
El concierto terminó con la interpretación de “Pelicula” y “Tú”, lo que aseguró un gran cierre para un concierto lleno de emociones y nostalgia para todos los seguidores que han visto como el proyecto de Sabino ha evolucionado a lo largo de los años. Sin duda, este fue un concierto digno de alguien que se ha esforzado tanto para alcanzar sus metas, superando obstáculos y críticas desde el inicio, siempre siguiendo el ideal de que primero hay que perder para ganar, y ahora Pablo Castañeda Amutioque, Sabino, sabe lo que se siente llenar por dos noches el Palacio de los Deportes.