Favoritos
Haz click en la banderilla para guardar artículos en tus favoritos, ingresa con tu cuenta de Facebook o Twitter y accede a esta funcionalidad.
Ya han pasado casi 40 años desde que se estrenó Rocky a finales del ya lejano 1976, y el mundo conoció por primera vez al boxeador italoamericano creado e interpretado por Sylvester Stallone. Después de haber protagonizado seis cintas y de emocionar a diferentes generaciones con sus peleas contra grandes rivales como Apollo Creed, Clubber Lang e Iván Drago, el “Semental Italiano” regresa como personaje secundario para entregarle representativamente la estafeta a un nuevo protagonista que resulta ser una joven promesa del boxeo que está en busca de una oportunidad para probar lo que vale.
En esta ocasión, la trama se centra principalmente en Adonis Johnson, el hijo de Apollo Creed, quien decide dejar todo lo que tiene para poder dedicarse de tiempo completo al box y lograr su objetivo de convertirse en un gran boxeador, para lo cual busca a Rocky, viejo rival y amigo de su fallecido padre. Ambos personajes aprenden diversas cosas uno del otro mientras el protagonista, interpretado eficientemente por Michael B. Jordan, comienza a recorrer el difícil camino que podría llevarlo a conseguir lo que tanto desea.
Creed, titulada Creed: corazón de campeón en México, es una efectiva reinvención de lo que fue Rocky en su momento, al contar la historia de un joven peleador que tiene un sueño y está dispuesto a hacerlo realidad.
Este spin-off le hace un claro homenaje a la franquicia a partir de la cual ha surgido, pero logra sobresalir por méritos propios gracias a su guión bien estructurado, un buen ritmo en la forma de presentar lo que sucede, la efectiva dirección de Ryan Coogler y, sobre todo, el trabajo de su dos actores principales quienes le dan vida a personajes luchadores y emotivos por los que es fácil sentir empatía. De hecho, Sylvester Stallone está nominado al Oscar como actor secundario por su actuación.
Es necesario decir que Creed no es Rocky VII. Para muchos podrá parecer solamente una película más de Rocky y están en un error, ya que se trata de algo distinto. La cinta es buena en diversos sentidos, y realmente vale la pena verla.