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Pararse sobre un escenario implica dejar todos los miedo atrás. Causa un cambio de personalidad, provocando que los instrumentos se unan a la línea consanguínea. Así Chris Corner explora la música a través de su proyecto IAMX, pues admite que gracias a este puede mostrar diferentes facetas que no se atrevería a realizar en su vida cotidiana, además de ayudarle a dejar salir todos esos sentimientos que confrontan al ser humano.
Al ver la calidez y plenitud con la que nos recibió Chris Corner, nos vuelve difícil imaginar que tiempo atrás, luchó contra algunos trastornos mentales que le hicieron pensar en retirarse de la música. Metanoia, es el sexto álbum de estudio de IAMX y el único recuerdo de esos momentos. Chris viajó a nuestro país para promocionar este disco y platicarnos el inusual proceso de producción, que realizó en el desierto de Joshua Tree,
“Este es un álbum del que me siento orgulloso porque traté de describir un momento muy oscuro y desconcertante de mi vida. Quería un lugar donde pudiera escapar, estar solo con mi guitarra, mi computadora y enfocarme en el mensaje de este disco. Fui a una pequeña cabina en el desierto y al estar ahí me enamoré del paisaje, el silencio y la naturaleza árida. Fue realmente inspirador”.
Corner ha viajado y vivido en ciudades tan cosmopolitas como Berlín y Los Ángeles, así que aislarse de todo lo que conocía fue un gran impulso que no contuvo a la hora de producir y ya prepara su próximo mini álbum titulado Everything is Burning (Metanoia Addendum) el cual contará con solo seis canciones.
“Bueno este próximo CD es prácticamente una extensión de Metanoia. Tenía canciones que no pude incluir en el álbum y debía asegurarme de que fueran escuchadas. Así que antes de producir un álbum nuevo, quise terminar esta era, por lo que es importante que esta siguiente producción sea vista como parte del mismo proyecto. Algunas canciones son muy emocionales y las otras son muy agresivas, esa es la esencia de IAMX ”.
Confrontarse con uno mismo es difícil, duele y no hay forma de escapar. Pero al final la decisión de sanar se toma de manera personal. Chris luchó y ganó su batalla, esperando que de alguna manera alguien pueda aprender de ese doloroso momento y busque luchar por seguir adelante.
“El niño miedoso que vive dentro de mí, sigue pensando que la música puede salvar al mundo y así es como mis discos han logrado salir a la luz. IAMX es mi niño interior y de alguna forma pienso que el mundo siempre está ardiendo, esa es la forma en que la sociedad actual vive. Pero de cualquier forma siempre habrá algo bello e inspirador”.
Hacer bailar es el ideal primordial de Chris, aunque confiesa entre risas que jamás sería un DJ porque seguramente las personas se aburrirían con su selección musical. “Me gusta y respeto mucho la cultura del DJ, pero no es algo que me gustaría intentar, lo que disfruto de hacer música es poder ser parte de la producción del sonido, mantenerme en contacto con mi público y ver sus reacciones ante un riff o una letra”.
Los shows de IAMX siempre están acompañados de potentes beats, imágenes que causan impresión y una fuerte carga psicológica y emocional que va desde el romance hasta mucho sexo. Apelando a todas las personalidades que están dentro de una persona.
“Quiero que pierdan sus personalidades y sus complejos para que se sientan lo suficientemente libres a experimentar ese momento y se vuelvan uno con la música. Algo así como una experiencia espiritual o un viaje de drogas. Un momento en el que puedas escapar de la realidad, porque es así como me siento cuando estoy en escena”, concluyó.