Fiesta Spotify en El Plaza Condesa

Celebramos a Spotify con The Chamanas, Clemente Castillo, Chetes y Enjambre.

Sin lugar a dudas, Spotify ha cambiado la manera en que consumimos y percibimos la música. Hoy, un disco no existe si no aparece en el catálogo de esta plataforma. Si un artista retira sus canciones, se convierte en noticia mundial. Sí, así como pasó con Napster, empresa originaria de Suecia que marcó un antes y un después en la industria musical.

En vista de este éxito, y teniendo en cuenta que México es uno de sus mayores mercados, no es extraño que la Fiesta Spotify haya sido un pretexto para celebrar la inclusión de la categoría 'música mexicana' al catálogo de la plataforma y así tirar la casa por la ventana en una fiesta con cuatro de los exponentes más importantes del rock mexicano: The Chamanas, Clemente Castillo, Chetes y Enjambre.

La banda fronteriza The Chamanas fue la encargada de calentar los motores de la fiesta. Sin mucho público, los de Ciudad Juarez interpretaron un puñado de canciones que, desafortunadamente, pasaron desapercibidas ante la falta de audiencia. Mismo caso con Clemente Castillo, al que le ha costado despegar en su faceta solista, claro ejemplo fue que la canción más exitosa de su set fue el cover a “Calaveras y Diablitos” originaria de la agrupación argentina, Los Fabulosos Cadillacs.

Quien sí ya tiene una carrera bastante amplia y sustentada como solista es Chetes quien, además de presentar temas de su nueva placa -Stereotipos, 2016-, hizo un recorrido por su carrera que incluyó “Completamente” y “Poco a Poco” como las más coreadas. El regio tuvo una buena presentación, gracias en parte a que el recinto ya estaba lleno y por otro lado a que sus melodías ya se encuentran tatuadas en los oídos del público mexicano.

El plato fuerte de la noche fue Enjambre, el proyecto con mayor crecimiento dentro del rock nacional de los últimos años. Los originarios de California repasaron éxitos como “Tulipanes”, “Ausencia de Cocina” y “Egohisteria”. Durante una hora, el público se entregó por completo a sus letras melosas, que seguro hicieron llorar a más de uno, mientras otros las dedicaban como técnica de ligue.

Al final el público la pasó bien, las bandas y solistas dieron todo para festejar a esta plataforma polémica por el poco pago a los artistas: irónico. Sin duda, si algo sabe hacer Spotify es darle a sus consumidores lo que piden, porque al fin y acabo, ¿quién habla mal del que paga la fiesta?