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Adanowsky: entre lo andrógino y lo retro

Adanowsky: entre lo andrógino y lo retro
Adanowsky: entre lo andrógino y lo retro

Artista(s)

27/May/2014

Adanowsky

ADA

Casete

2014

Lo mismo es etiquetado como artista y genio, que como un hijo de papi oportunista, idolatrado por una bola de chairos. También hay quien asegura que el éxito de Adanowsky no radica en su música, sino en el ejército de mujeres que se lo quieren tirar.

Sea cual sea la postura, hay tres cosas que no se pueden negar; la primera es que es un hombre culto que llena su obra de citas, la segunda es que es un gran mercadólogo que sabe vender cada parte de su personalidad y la tercera que su irreverencia, pasos de baile y carisma lo hacen todo un showman.

La experiencia Adanowsky va más allá de la música, y tras dos discos en los que personificó una especie de dandy (mujeriego en El Ídolo y romántico en Amador), ahora llega con Ada, un personaje andrógino con guiños a PrinceGrace Jones y David Bowie.

Ada fue grabado en un sótano en París con los Gush, pues Adán quería un sonido orgánico. El álbum contiene puros temas en inglés, ya que Jodorowsky es trilingüe y en su infancia fue a escuelas americanas en Francia, además de que planea ir de tour a países distintos a los de habla hispana.

En conjunto, el material es una fiesta retro que suena a lo que su creador pondría en un DJ set. La producción es buena y se nota el esfuerzo por pulir su voz que ahora abarca más agudos. El protagonismo del bajo, los sintetizadores y los solos de guitarra también son una constante.

El álbum inicia con su personaje, Ada, dando la bienvenida: "Welcome, get ready to enter my world, open your heart, open your mind", palabras que son seguidas por una explosión. El siguiente tema es "Dancing To The Radio", que con su jocoso video fue elegido como primer sencillo, aunque está lejos de ser lo mejor del material y su sonido recuerda un poco al Bankrupt! de Phoenix.

De las 10 canciones destacan la muy bailable "I Don't Love You", digna de Pointer Sisters, y "Sexual Feeling", que suena a una mezcla de country con los Jackson 5, misma que presentó hace un par de años en la muerte de Amador en el Teatro Metropólitan. Otros buenos momentos son "Rock Me", con su base rítmica cachonda y coros tipo góspel, y "Let's Bring It Back".

Ada también contiene baladas, como "Would You Be Mine", que incluye una conversación en francés y español muy a la  Serge Gainsbourg; y "Crossing "The Line".

Con su onda medio disco que da ganas de bailar como los Go-Jos y aplaudir en la pista, este disco le ganará admiradores nuevos y le hará perder unos cuantos; otros lo considerarán placer culposo, pero independientemente del éxito que obtenga, es un parteaguas en la carrera del cantante que muestra que, contrario a sospechas, sus personajes no son una payasada para ser provocador y maquillarse, sino una forma de no limitarse a un género y ser congruente con su discurso.