Favoritos
Haz click en la banderilla para guardar artículos en tus favoritos, ingresa con tu cuenta de Facebook o Twitter y accede a esta funcionalidad.
Anoche, el Foro Indie Rocks! se convirtió en un santuario de ensueño bajo el hechizo de Sugar Candy Mountain, una banda que fusiona la psicodelia de los 60 con el folk, el pop barroco y toques modernos. El ambiente íntimo del venue fue el lienzo perfecto para una experiencia que desdibujó las fronteras entre la realidad y el sueño.
La velada comenzó con Petite Amie, los teloneros, quienes prepararon el terreno con su pop psicodélico vibrante. Sus melodías suaves y arreglos sofisticados crearon una atmósfera mágica, un preludio a lo que estaba por venir.
Cuando Sugar Candy Mountain tomó el escenario, nos sumergieron en un viaje sensorial. "Tired" nos envolvió en un remolino de guitarras reverberantes y suaves melodías folk, evocando la influencia de The Byrds y The Velvet Underground. La transición a "Running From Fire" equilibró la intensidad con una calma hipnótica, una muestra del balance entre la psicodelia cruda y el pop refinado.
El cover de "Playground Love" de Air fue un punto culminante. Con un toque fresco, la banda infundió la icónica melodía con su esencia única, creando una experiencia etérea que se deslizó suavemente a través de la noche. Los visuales lisérgicos que acompañaron el tema nos transportaron a un universo de colores y formas en constante cambio, realzando la sensación de inmersión.
"Electric Wind" exploró paisajes sonoros espaciales, con texturas que evocaron el espacio rock y la ambientación etérea de grupos contemporáneos. En contraste, "666" ofreció una dosis de psicodelia cruda, una explosión de energía que nos mantuvo anclados en el presente mientras nos sumergíamos en su intensidad vibrante.
El clímax llegó con "Atlas" y "Windows", donde la banda desplegó melodías envolventes y arreglos sofisticados, reflejando el pop barroco con su riqueza sonora. La conclusión con "Tidal Wave" fue un crescendo emocional, cada nota resonando como olas que nos arrastraban hacia un mar de introspección y belleza.
En conjunto, el concierto fue un viaje donde la psicodelia se fusionó con una visión artística única, transformando el Foro Indie Rocks! en un portal a un mundo de ensueño. Cada canción fue un capítulo en una experiencia inolvidable, donde el pasado y el presente se entrelazaron en un abrazo sonoro sublime.