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Qué bien se siente cuando la música te hace flotar, dar vueltas de puntitas y obsequiar flores con una sonrisa en el rostro. Qué divertido y asombroso resulta cuando ves reflejado ese dramatismo y la magia de las canciones en un ser totalmente libre arriba del escenario. El secreto de la magia no se revela de manera cruda, sino a través de la finura de la interpretación y un compilado de palabras acertadas y melodías cósmicas. ¡Bienvenida a México, Weyes Blood!
Natalie Mering tiene el don de crear y trasformar la música en historias comunes con toques de ensueño y literalmente, fuera de esta galaxia. Anoche, el proyecto americano se presentó por primera vez en la CDMX y el Auditorio BB la acogió para su debut en los escenarios mexicanos.
Weyes Blood cautivó a los presentes con algunas de las canciones que forman parte de su repertorio. (El setlist lo podrás checar al final de este texto), pero más allá de escucharla cantar en vivo, -que a propósito, fue similar a una experiencia religiosa-; logró que todos (re)vivieran sus propias historias y quimeras; apoyándose de atractivos visuales y un juego de luces que se alineaban a su danza y que por momentos la llenaban de una neblina; volviéndola identificable. Solo su sombra bailarina cobraba vida para continuar con el show.
Las canciones de Natalie persiguieron a los solitarios y los abrazaron; a las parejas les rectificó que el amor existe y que el corazón brilla con tanta intensidad cuando estás con esa persona especial.
Por más de una hora soñamos despiertos y nos dejamos llevar por la pureza de su voz y su sonrisa; volviendo la hora del agradecimiento en un momento familiar que se celebró con flores y ovaciones. ¡Larga vida, Weyes Blood!
Setlist - Weyes Blood Auditorio BB