Beth Orton
Weather Alive

Un viaje en carretera a la nostalgia noventera.

Beth Orton, un referente de la música de los 90s, especialista del folk y la electrónica, quien saltó a la fama por sus colaboraciones con William Orbit, Red Snapper y The Chemical Brothers, presentó luego de seis años, su octavo álbum de estudio Weather Alive el 23 de septiembre, bajo el sello de Partisan Récords. 

Este es el primer disco que fue producido exclusivamente por la compositora de Reino Unido y cuenta con las colaboraciones del baterista Tom Skinner de Sons of Kemet y The Smile, también podrás encontrarte a Tom Herbert en el bajo. 

Otros músicos como Shahzad Ismaily en la guitarra, batería, armónica, bajo y Moog, Sam Beste al vibráfono, Francine Perry en los sintetizadores y Alabaster dePlume en el saxofón, añaden matices al álbum.

Mucho se habla sobre como Beth Orton, una estrella en ascenso, fue fundiéndose con el paso del tiempo, pero este álbum refleja el poder que posee y la capacidad de plasmar sus vivencias con tan solo un piano de segunda mano y su voz; guardando por un momento su icónica guitarra para ofrecer un disco sumamente personal y solitario.

La época se adecúa a un disco que emana una vibra otoñal, anunciando que un año más está a punto de terminarse y los recuerdos de todo lo vivido comienzan a llegar. Su sonido trae calma y melancolía.

Beth Orton comienza su nuevo álbum con “Weather Alive” un tema de poco más de siete minutos que al pasar del tiempo la atmósfera va transformándose al compás del sonido de las guitarras; ¿La recomendación? Déjate llevar por el tema introductorio que se siente como un instante en las olas del mar.

“Friday Night”, es una reflexión de la compositora sobre el amor y la fe que ponemos en otra persona, también mezcla temas sobre la automedicación y el alcohol, después de todo el viernes se siente como un pequeño respiro para todos. “Fractals”, un tema optimista sobre encontrar el amor, y de pronto empiezas a creer en la magia. 

“Haunted Satellite” es un tema suave sobre cómo vivimos la vida, los cambios en nuestras formas de vivir y lo ajenos que podemos sentirnos a veces ante el mundo. “Forever Young” habla sobre un amor que no conoce el tiempo, se mantiene ahí, vivo a pesar de todo, mezcla un sonido mucho más alternativo, pero mantiene viva una corriente que sigue la línea de los ritmos de los 90s. 

El álbum cada vez se vuelve más personal y “Lonely” es una canción que habla sobre sus padres que fallecieron cuando ella aún era una adolescente. “Arms Around a Memory”, abrazar un recuerdo, la nostalgia de extrañar y sentirse abrigado con la compañía de una memoria, es una balada suave con tintes cercanos al jazz, acompañado por armonías que dirigen hacia el sonido de un saxofón. 

“Unwritten”, el tema final del álbum y el segundo en durar poco más de siete minutos, la despedida se siente, entre ecos esperanzadores y una tristeza indescriptible de un amor que trató de mantenerse vivo.