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A casi todos nos han dicho que a partir de los 20 la vida se vuelve difícil, preguntamos por qué y lo único que obtenemos es, que de acá en adelante comienzan los verdaderos problemas. Desigualdad social, económica, problemas amorosos más fuertes que los de la adolescencia y cuestiones existenciales llegan para replantear nuestra vida.
Por eso mismo, a veces es necesario encontrar en el arte algunas obras que reflejen nuestro contexto y funcionen como bandera para buscar algo mejor. Caravana, el trabajo debut de Valentín Oliva, aka WOS, podría ser una de esas obras enciclopédicas que enmarcan los problemas que viven las personas que transcurren por el segundo piso actualmente. Su reciente nominación al Grammy latino como mejor nuevo artista es apenas uno de los reflejos más pequeños de su impacto.
Es que a tan solo un año de su lanzamiento, Caravana es una obra que tiene una vigencia interesante, esto gracias a la manera en que toma pulso a las situaciones sociales que atraviesa no solo Argentina, sino otros países como Chile, Venezuela, Puerto Rico, México o Colombia. Cada una de estas naciones llenas de descontento, brutalidad policial y problemas económicos que hacen pensar a la gente en salir a protestar.
Desde el primer tema, “Canguro”, podemos escuchar toda esta noción, donde el rapero enarbola una batalla de freestyle donde es un gobernante burlándose del pobre por un lado, y por otro es un joven que responde y sale a las calles a pelear. Fue una de las canciones que sonaron en las calles de Santiago con el estallido social que comenzó hace un año.
Esos asuntos que tenemos que entender por la mala, el hecho de que no todos los que quieren pueden y que al final tenemos que hacer algo al respecto es narrado con las rimas de Valentín. Más que ser una palmada en la espalda y un “Todo va a estar bien”, es una incitación para salir a pelear, porque “Sin oportunidades esa mierda no funciona. No, no hace falta gente que labure más, hace falta que con menos se pueda vivir en paz”.
“Luz Delito” le sigue la pauta, una canción que samplea el riff de “Luzbelito y Las Sirenas” de Patricio Rey y Sus Redonditos de Ricota, y que llena de rimas poderosas la desesperación que lleva a la incoherencia. Por la que pasan muchas personas en ambientes vulnerables, por barrios que no escucha dios. De hecho, aprovecha en sus letras para contradecir la devoción del personaje Luzbelito de la canción de los 90.
El artista logra mezclar el poder coyuntural del rap con la inmortalidad del rock en Latinoamérica con una voz rasposa y con un beat tenso, lo que ha hecho sus conciertos una experiencia particular.
Llenando dos fechas en el Estadio Luna Park en pocas horas, relativamente, WOS es el ejemplo de un fenómeno que creció gracias al mundo del freestyle hasta transgredir la cultura pop. Sus rimas en batallas de rap tienen un historial de más de siete años, por ello, atraer a jóvenes que disfrutan de estos eventos al consumo de música en formato de discos o festivales es una labor que pocos han conseguido.
Más allá de lo social y comercial, Caravana también fue una punta de lanza para indagar en otros temas. El artista logra abrir su mente y su corazón para invitar a querer de manera responsable aunque sin limitaciones.
“Melón Vino” es un claro ejemplo. El rapero se desnuda como cualquier persona cuando se enfrenta a la soledad. Hace un listado de las cosas buenas que tiene y las paraliza con un contundente “Rompo todo lo que soy”. Tal vez el presente a veces representa poco para una juventud que tiene tantas barreras, entonces el deseo del amor indiscriminado y consciente tiene mucha relevancia en esta actualidad.
“Si el mundo está roto que traigan otro, o mejor nos vamos todos nosotros. No quiero vivir con sabor a poco, no quiero morir sin volverme loco. Cuando miremos y no entendamos nada de todo lo que ahora vemos voy a quedarme con vos al lado cuando todo se nos ponga feo”, encarna WOS con una fidelidad y sobre todo una responsabilidad afectiva muy importante, que culmina poéticamente con “Nuestra mirada es la fuerza más linda de todas”.
Podemos empatar con esta noción “Okupa”, un tema vuelto pop con toda la influencia de la nueva generación de artistas argentinos. Donde podemos escuchar un estilo parecido a Juan Ingaramo o LOUTA. Este asunto del enamoramiento y la pasión que siempre nos dicen que vamos a perder cuando dejemos de ser jóvenes se va por un tubo al escuchar el “Somos inmortales cuando nos miramos fijo”, o tal vez el “Te vi un rato y se me fue lo triste”.
Y bien, fuera de exagerar las letras de una canción, hay que hacer hincapié en un futuro no muy lejano, donde podamos superar las barreras tradicionales del amor.
Caravana es una obra que en menos de 20 minutos puede decir muchas cosas distintas. Representa para el artista una serie de fotografías de la manera de ver su vida en Buenos Aires, que finalmente se puede trasladar la experiencia a cualquier ciudad latina.
“Fresco” es una prueba emocionante. En este track WOS viaja a los linderos del jazz y los bajeos funk para declarar “Si esta ciudad parece un congreso de infelices, el cemento caliente ya formó un desierto, el mundo que es un manicomio pero a cielo abierto”. Quizás esa sensación densa la hemos sentido con la falta de actitud que rodea al mundo, esa apatía para darle vuelta al partido.
“Pantano”, en un sentido un poco más personal, también habla de ese vacío, el cual se traslada a esa batalla silenciosa a la que nos enfrentamos a la hora de ver al futuro, cuando buscamos respuestas y no hay nada, solo oscuridad que no te permite acertar y una angustia que te persigue mientras sigues diciendo que todo está bien. Ese desespero a veces parece necesario de afrontar, pero aceptarlo es un buen inicio.
Finaliza esta obra con “No Va a Bajar”, un cierre que te recuerda de manera cruda que la lucha sigue, así como la vida. Que los veinte si son malos, pero solo abriéndote a ti mismo los podrás hacer mejores. “Vomito brea, la oscuridad coimea y se volvió corrupta la luz que hay en mí. Maldita esa sonrisa que va de punta a punta y camufla depresión pa’ que no me hagas preguntas” es el resumen de lo que a veces ocultamos.
“Y antes de endurecerme y joderme por completo, prefiero que la luna haga pomada mi esqueleto” es la última rima, con la que WOS recuerda que pese a sentirse vencido no hay que poner el freno.
Caravana es, entonces, una obra que refleja puntos importantes a tratar. A poco más de un año de su lanzamiento, y pese a todo el tema de la pandemia, las historias saben a lo mismo y al parecer lo sabrán por muchos años. Pero al menos hay, en sus siete canciones, una alternativa para salir a la vida sin perderle el lado positivo. Dale play a continuación.
Por su parte, WOS continúa un camino exitoso. Ese artista que apareció de manera sorpresiva interviniendo con rimas en una canción de Mercedes Sosa se ha transformado en un referente, que ahora es respaldado por figuras como el Indio Solari o Andrés Ciro Gómez. Pero lo anterior, además de su triunfo en los premios Gardel y su nominación en los grammy latinos parecen no ser el pico creativo de un joven de 23 años que ha reinventado el mundo del rap en su país.