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Seis años pasaron para que Vampire Weekend lanzara su cuarto disco, y durante ese periodo Rostam Batmanglij salió de la banda, Ezra Koenig se convirtió en padre y Trump ganó la presidencia. Indie Rocks! platicó con Ezra sobre Father of the Bride, la evolución de la banda y el amor de México por el rock indie.
A pesar de los cambios importantes en los últimos años, hubo algo mucho más grande que influyó en la realización del disco: envejecer. “Los primeros tres álbumes salieron cuando estaba en mis 20, y este en mis 30, así que más allá de la gente en la banda, la política, mis cosas personales, envejecer es el cambio más grande para un artista”.
Ezra está acogiendo su madurez, algo que se refleja en sus letras a lo largo de los años. “’Walcott’ fue una de nuestras primeras canciones, la escribí mientras estaba en Columbia. Es divertida, y un poco chistosa. ’Taxi Cab’ aborda sentimientos complicados con un punto de vista más sofisticado, y ‘This Life’ también trata de manera similar de abordar las complejidades y ambigüedades en una relación, pero es un poco más madura, es más universal”.
No solo él y la banda están madurando, también sus fans, un recorrido que inició con el post punk revival de Nueva York al inicio del milenio. Y a pesar de que son casi 20 años, México sigue teniendo una conexión especial con este movimiento.
“Desde los primeros días de Vampire Weekend, todos nosotros mostramos una conexión real con los fans mexicanos. Incluso al punto de que cuando estábamos grabando nuestro primer álbum, recuerdo que era muy importante que grabáramos ‘Cousins’ en México. Y lo hicimos, rentamos un estudio en la Ciudad de México”, afirmó Ezra recordando sus lazos con nuestro país.
“Siempre nos ha inspirado México, la cultura mexicana, su música y siempre hemos recibido mucho apoyo. No sé si es más por su cultura o el rock, pero el aprecio es mutuo”.
Y si bien, ellos están incluidos en esta ola neoyorquina, su aparición se dio entre generaciones al final de la década pasada, lo que les permitió adaptarse casi de inmediato a los cambios en la industria.
“Me hice amigo de muchas personas en esas bandas, y los conozco, no obstante somos media generación debajo de ellos, como 5 u 8 años más jóvenes. Así que, por un lado admiro esas bandas y recuerdo esa era, sin embargo también salimos justo en la era del mp3, el inicio del streaming, el inicio de la era del Internet, pero seguimos conectados con la vieja escuela, el viejo sistema de grabación, de lanzar álbumes”.
Father of the Bride contiene 18 canciones, inusual para un álbum en la actualidad. “En cada álbum digo ‘hagamos algo que no hemos hecho antes’, y te puedo decir que este es el tipo de álbum que necesitaba como artista en este momento”.
Vampire Weekend presentó Father of the Bride en el festival Coordenada en Guadalajara, en el Live Out en Monterrey, y en sus dos shows en el Teatro Metropólitan en la Ciudad de México.