Las Ligas Menores
Fuego Artificial

El soundtrack de una relación fallida.

Fuego artificial es una montaña rusa en la que al principio tienes miedo a abrir tu corazón, pero te arriesgas y te enamoras. Después de algún tiempo te das cuenta que el fuego no es real, la relación termina y vuelve al punto donde iniciaste.

Anabella Cartolano (voz y guitarra), María Zamtlejfer (voz y bajo), Micaela García (batería) Nina Carrara (teclados, percusiones y coroe) y Pablo Kemper (voz guitarra) le cantan al corazón roto que dejó esa relación fallida en un disco de 13 canciones producido por Tom Quintans, Lucas Rosseto y Felipe Quintans.

Lo hemos intentado tantas veces y fracasado que preferimos no volver a arriesgarnos. “Peces en el mar” te recuerda que por más que falles, siempre habrá otras opciones. La batería te marca el ritmo para que te olvides del qué dirán y los rasgues de guitarra te envuelven en un mar de rock pop lleno de resiliencia. Una vez sanados y listos para tomar el corazón por la aorta, “Contando lunas” es una oda al amor ciego e incondicional.

Tras una decepción amorosa quisiéramos olvidar, sobre todo cuando aún queremos a la persona y los sentimientos están en la superficie, ahogándonos. Anabella, con su voz dulzona y llena de melancolía, canta “En Invierno”. En esa línea de desamor, “Mejor así” entre rasgueos de guitarra le abre paso a la resignación.

¿Alguna vez han salido con alguien engreído y mentiroso, que siempre quiere tener la razón? Seguro estoy describiendo a alguno de sus ex. “La paciencia”, eso que nos hace falta para coexistir con personas así, aunque normalmente somos conscientes de esas “maravillosas cualidades”, al finalizar la relación. Las Ligas Menores le cantan iluminación mental y nos recuerdan que el tiempo siempre tiene algo que enseñarnos.

El teclado de Nina; así como las guitarras de Anabella y María crean en “Segunda parte” una dulce melodía que destroza, aniquila los malos recuerdos y entonces nos preguntamos: ¿Regresar? ¿Por qué no? Siempre nos queda esa duda, “qué hubiera pasado si…” y a pesar de todo nos arriesgamos. Ya conocemos la situación, pero ahí vamos como gorda en tobogán porque queremos creer que merece la pena.

“Los días”, la única canción interpretada por Pablo, narra el ocaso de la relación. Ese momento en el que te das cuenta que todo está por finalizar y añoras los buenos momentos.

¿Qué es lo que pasa cuando uno da todo y a cambio recibe nada? “Ni una canción” describe perfectamente ese sentimiento. Es ese tema que debes escuchar en tu habitación a todo volumen mientras saltas y desgarras tu alma y tu garganta. En vivo seguramente será la favorita para el mosh pit.

El segundo disco del quinteto argentino cierra con la melancolía y los sintetizadores de “Fin de año”, melodía acompañada solo por cuatro versos al inicio de la canción que marcan la despedida.