Akamba 2018: Entrevista con Sinkane

Sinkane, el genio sudanés enamorado de México.

El británico de origen sudanés, es un artista muy especial, no solo por sus notables influencias, que van del funk, el R&B hasta el kraut y rock progresivo. También por su recorrido como músico de sesión, colaborador en bandas como Caribou y of Montreal, o sus inicios trabajando en radios universitarias. Ahora, el intérprete regresa a nuestro país, a promocionar su sexto álbum de estudio. Su visita se da a un año del lanzamiento de su último material, debido al éxito que ha tenido alrededor del mundo.

“He ido muchas veces a México. Me encanta la gastronomía, la arquitectura y la hospitalidad; lo mismo que a todos les gusta de México. Pero lo que me parece verdaderamente fascinante es que conservan su origen, lo mantienen desde hace cientos de años. Y no solo hablo de lo tangible o cosas monumentales como las pirámides, las raíces de México salen a flote en el día a día, y eso es algo que no se encuentra en cualquier lugar”.

A pesar de frecuentar nuestro territorio y poder desarrollar una perspectiva sobre nuestra cultura, Sinkane nunca ha visitado uno de los sitios emblema de la república: Jalisco. Aunque lo hará para presentarse en el festival Akamba, que tendrá lugar en la región de Tequila.

“Siempre antes de visitar cualquier lugar trato de investigar todo lo que puedo. En realidad fue una grata sorpresa descubrir que estaré en la capital del mariachi, porque es una de mis géneros favoritos. Me encanta y estoy muy influenciado por la música latina, la salsa, la samba. Pero tengo esta conexión especial con el mariachi. Tienen canciones muy melancólicas, que explotan con trompetas y violines. También me enteré que voy a tocar cerca de un volcán inactivo, eso será interesante”.

A pesar de tener géneros favoritos, al ser un músico tan versátil, es imposible encontrar el hilo conductor en los temas de Sinkane, un estilo fundamental en su trabajo. Cada elemento parece tan vital como intrascendente, todo es desechable, pero aporta algo a la esencia de este proyecto.

“Sinkane siempre está evolucionando. Inicié tocando y grabando todo, pero ahora tengo una banda, y todos aportan algo importante, sus propias ideas. No es mi banda, es la banda en la que estoy, en eso se ha convertido este proyecto. Empezamos con un estilo, un concepto, y ahora estamos en algo muy diferente, porque lo único constante aquí ha sido el objetivo, que es conectar con la gente”.

Sobre lo siguiente en la evolución del grupo, Ahmed, reveló que ya está trabajando en el sucesor de Life & Livin' It, y que ya tiene catorce canciones listas para grabar, aunque no todas ellas estarán dentro de su séptimo álbum de estudio.

"Siempre es mejor tener más canciones de las que vas a meter, porque no sabes lo que va a funcionar en ese momento, o si los temas en conjunto se van a mezclar bien. También hay otras canciones que hay que guardar para poder sacarlas en el momento ideal; por ejemplo, 'Deadweight', que abre Life & Livin' It, la grabé originalmente para Mars. Así que hay que ser cuidadoso".

Conectar con la gente es la intención principal de Sinkane, por lo que adentrarse en el contexto político y social es inevitable. De hecho, el sencillo "U'Huh", fue tomado por muchos estadounidenses como un tema anti Trump y que habla sobre el contexto actual de Norteamérica.

"Donald Trump es alguien ignorante, no hay otra forma de describirlo, pero representa a un enorme grupo de norteamericanos que están asustados y que buscan alejarse del mundo, creyendo que así también se alejarán de los problemas. Líderes como él buscan aprovecharse de ese miedo para crear un mundo gris, aburrido y excluyente, eso es lo que representa su muro. Además de la negación de que Estados Unidos fue creado por inmigrantes".

Hablando de Trump y considerando que el nombre Sinkane proviene de un tema de Kanye West, era imposible no hablar sobre la reciente polémica en la que se ha visto envuelto el rapero, al mostrarse en favor del presidente, cuyas ideologías han sido descritas como racistas y excesivas.

"Es algo muy difícil, no estoy a favor de lo que hace, pero comprendo sus intenciones. Kanye trata de ser el puente entre la gente y el presidente, la parte que concilie la izquierda y la derecha. Pero está tan metido en su papel y el narcisismo lo ha envuelto de tal manera que no se da cuenta de sus errores y piensa que todos descifremos lo que quiere hacer o que esperemos pacientemente a que nos aleccione, lo que es bastante absurdo".